Entre síes y noes, declaraciones poco concretas y «balones fuera» el conseller de Sanidad, Luis Rosado, admitió ayer que los sábados cerrarán los consultorios auxiliares con poca actividad asistencial. Se refería a las asistencias de urgencia que se realizan en estas instalaciones que funcionan como apéndices de los centros de salud en los barrios. La Conselleria de Sanidad no pudo precisar cuantos consultorios cerrarán definitivamente sus puertas los sábados, como anunció Levante-EMV. La medida se ha aplicado ya en el consultorio de la calle Bilbao de Valencia.
La decisión, según anunció el departamento que dirige Rosado, ha sido consensuada con los profesionales y los responsables de atención primaria del centro de salud Trinitat, que es donde son derivados los pacientes que requieran cualquier atención urgente en sábado. Las mismas fuentes agregaron que para decidir el cierre de los consultorios se tendrá en cuenta el impacto para la población.
Las condiciones para el cierre de los consultorios serán dos: que no esté a más de 500 metros de un centro de salud y que no atienda más de diez urgencias. El responsable sanitario, por su parte, declaró que «no se atrevería» a cerrar ningún centro de salud que implique un deterioro de la calidad asistencial ni que suponga una sobrecarga del sistema.
Rosado explicó que los centros de salud permanecerán abiertos «salvo en algunos casos puntuales donde los profesionales y los propios departamentos decidan mantener un horario diferente y siempre que sea para mejorar la calidad de la asistencia que se presta en cada centro».
Posteriormente, la conselleria volvió a precisar que el cierre los sábados, que empezará a aplicarse a partir de marzo, no afectará a los centros de salud sino a los consultorios.
El conseller indicó que la intención de su departamento es que los centros de salud permanezcan abiertos hasta las 21.00 horas (para atender las urgencias de los consultorios), «salvo en casos puntuales» en los que los médicos y los departamentos de salud acuerden otro horario diferente, «para mantener la calidad asistencial».
El cierre de consultorios auxiliares es una de las 300 medidas que se contemplan en el Plan de Mejora de la Eficiencia que la conselleria tiene en estudio desde hace dos meses para ahorrar entre 400 y 500 millones de euros.
Por otra parte, la portavoz adjunta de Compromís, Mónica Oltra, alertó ayer del caos y la saturación del sistema de salud público que podría suponer el cierre de centros los sábados.
El Sindicato Médico de Asistencia Pública (Simap) aseguró ayer que con esta ampliación de horario, la Generalitat no podrá cumplir su promesa de mantener la calidad en la atención al ciudadano y ha denunciado la «improvisación» de estas medidas y la «falta de información y consenso» con los trabajadores.
