La Asociación de Afectadas por la vacuna del Papiloma Humano, que fundaron en Valencia los padres de una adolescente que en febrero de 2009 sufrió efectos adversos tras recibir la segunda dosis, reclamó ayer en Madrid a la Administración sanitaria que retire la financiación pública de este producto, lo que significaría su salida del calendario vacunal.

El catedrático de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Universidad de Alicante, Carlos Álvarez-Dardet, declaró que no existe evidencia científica de que esta vacuna prevenga el cáncer de cuello de útero. "No es eficaz y tiene efectos adversos notables", afirmó el especialista que recordó la reciente muerte de Andrea, una chica de trece años que falleció hace un mes en Gijón tras vacunarse contra el virus del papiloma humano.

Álvarez-Dardet indicó que aunque la información es prometedora, faltan al menos diez años de seguimiento para afirmar que previene el cáncer de cuello de útero, si bien precisó que el tratamiento previene lesiones precancerosas "que revierten espontáneamente pero aún no se ha demostrado que pueda prevenir el cáncer de cuello de útero, como se afirma", expresó.

El catedrático recordó que sólo hay cinco años de seguimiento, ya que fue en 2007 cuando la agencia americana de medicamentos (FDA) aprobó la comercialización de la vacuna, al que de forma inmediata se sumaron todas las agencias europeas.

El catedrático de Medicina Preventiva señaló también que los efectos adversos "son notables" y comprenden desde afecciones dermatológicas, alérgicas y neurológicas, sobre todo. A la pregunta de si cree que la niña de Gijón murió como consecuencia de uno de los efectos adversos por la administración de la vacuna, Álvarez-Dardet declaró: "tenía un problema de asma y como médico yo entiendo que sí". Seiscientos profesionales sanitarios apoyan la retirada de la vacuna de la SS.

Por otra parte, la presidenta de la asociación, la valenciana Alicia Capilla informó que Farmacovigilancia ha recibido 737 notificaciones de efectos adversos en España, según les informó la Subdirección General de Atención al Ciudadano.

De hecho, su hija Raquel que estuvo ingresada en el hospital Clínico de Valencia con síntomas neurológicos durante casi dos meses todavía no está dada de alta, aunque se encuentra bien. "Es muy afortunada porque comparada con otras niñas no presenta secuelas, expresó Alicia Capilla.

Otros laboratorios realizan en estos momentos estudios clínicos inscritos en el registro mundial de ensayos con vacunas de efectos similares para disponer de los datos preceptivos que se requieren antes de iniciar la comercialización.