La exconsellera María José Català realizó ayer un discurso que incluso diputados de la oposición calificaron de brillante. Que Bonig le encargara el debate a quien internamente considera rival no pasó desapercibido porque era un encargo envenenado. Ya la diputada María José San Segundo salió en 2016 a defender la posición del grupo sobre reprobar a Barberá.