Puede valer para el comité provincial del PSPV una frase recurrente en la política de los último tiempos: está bien si bien acaba. La aprobación de Toni Gaspar para renovar como presidente de la Diputación de València (único punto de la convocatoria) salió adelante por unanimidad y sin que ningún asistente manifestara oposición alguna. El alcalde de Faura ya tiene todas las credenciales para asumir de nuevo la presidencia en el pleno del próximo día 10.

Tanto la ejecutiva como el comité fueron de guante blanco, según diversas fuentes consultadas de diversas corrientes socialistas. Sin ningún escollo.

Queda un mar de fondo, que se puede comprobar en la asistencia, más reducida de lo habitual, a este órgano, que no suele ser muy poblado. Ayer acudieron 82 de 263 miembros, según las fuentes. Contó el hecho de ser el mes de julio, pero también el malestar en alguna organización comarcal por la elección de los diputados provinciales, admitieron fuentes de la dirección.

No parece casual que los secretarios generales y otros dirigentes de algunas destacadas comarcas como la Costera y la Ribera Baixa no se dejaran ver en la sede de UGT en València. Algunas de estas agrupaciones discreparon de la elección de diputados al no tenerse en cuenta la que ellas habían aprobado. No obstante, ninguna fue después más allá.

Estuvieron los 13 diputados provinciales al principio. Se hicieron la foto de grupo. Después Rafa García, el que sonó como el plan del sector de la titular de la provincia, Mercedes Caballero, se ausentó. No es miembro del comité provincial y tenía ocupaciones, aclararon en su entorno para evitar otras interpretaciones. Así que no estuvo en la foto de la aclamación de Gaspar. Este estuvo arropado por algunos de sus más afines, como Carlos Fernández Bielsa y Jordi Mayor. ¿Un rearme de los hombres de Jorge Alarte?