"Encarga tu trabajo ¡Nosotros lo hacemos ! ¿Estás cansado de hacer los trabajos que te exige la Universidad? ¿Quieres tener más tiempo libre? ¿Necesitas ayuda?". Así arranca la portada de una web que se define "líder en el sector" y con "10 años de experiencia" escribiendo trabajos finales de grado (TFG) y de máster (TFM) por encargo. Una de las decenas que hay al alcance de un par de clicks en Internet. Muchas cuentan con garantía de que pasaran el software antiplagio de las universidades, y algunas hasta con 'tutores' que acompañan al alumno interesado en comprar su trabajo final.

María tiene 30 años y pagó por su TFM. Explica que su empleo no le dejaba tiempo, el tema que debía defender no le interesaba demasiado y le daba "mucha pereza porque no sabía de dónde iba a sacar las horas". Así que abrió su portátil y buscó. "Me salía mucho más rentable pagar y olvidarme que coger la jornada reducida en el trabajo para hacerlo", explica. Contactó con la página, leyó la normativa, y le mandaron un presupuesto. Mil euros.

Había páginas que costaban mucho más y otras bastante menos, y pensó que pagando más dinero saldría mejor. Pero intentó una rebaja. "Como un amigo también lo necesitaba les dije que si nos hacían oferta. Dijeron que sí y pagamos 1.850 por los dos TFM", asegura. Se paga todo antes de la entrega, y ellos te aseguran que tu 'tutor' se pondrá en contacto por wattsap contigo cuanto antes. La empresa certifica que el resultado será a prueba de 'turnitin' un programa informático antiplagio que usan varias universidades valencianas.

"Me salía mucho más rentable pagar y olvidarme que coger la jornada reducida en el trabajo para hacerlo"

Ni siquiera hace falta saber el tema de tu trabajo, algunas webs lo escogen por la persona. De hecho, hay empresas que publicitan que "si nos permites elegir el tema de tu trabajo, te lo enviaremos totalmente realizado en menos de una semana". Si les hablas del tema de tu trabajo y lo necesario para llevarlo a cabo, se comprometen a "mandar presupuesto en menos de 24 horas".

Aunque no todas las soluciones pasan por el mercado negro. Noelia descartó las webs para su trabajo final de grado. En concreto, para su tipo de trabajo, páginas, referencias y bibliografía, le pedían entre 300 y 350 euros ya que solo necesitaba la parte práctica. Algunas webs fácilmente accesibles por internet son capaces de presupuestar el precio de los trabajos con ese grado de detalle. Añadir la bibliografía APA a tu TFG es un suplemento de 9 euros. Si necesitas de una a cinco referencias son cinco euros, de 6 a 10, diez euros. Noelia lo rechazó para acabar pagando su trabajo final de carrera a una conocida que se prestó a ello, y sacó un 8,9.

El coste del atajo

María siguió en contacto con su 'tutor', que cuando le envió las versiones finales vio que no merecía tanto la pena coger ese atajo para pagar. "El resultado fue malísimo, y se notaba mucho que estaba escrito por alguien de América Latina, con leer un párrafo era evidente, todo lleno de frases copiadas y pegadas", recuerda. Explica que ella superó la prueba por los pelos después de tener que rehacer todo el trabajo, pero en el caso el amigo por el que le hicieron la oferta pasó el máster con un resultado de 8,5 en el trabajo final.

Las entregas estaban acordadas cada dos semanas y se planificaban 'tutorías' con la persona que estaba redactando el documento. Aunque finalmente dice que "estaba súper descontenta y puse un comentario de queja", se dio cuenta de que todas las opiniones negativas se borraban a los pocos minutos de la web para dejar solo las positivas.

Noelia explica que estas páginas "son fácilmente accesibles desde cualquier sitio, es muy fácil que te aparezcan en el primer resultado de Google en cuanto buscas 'necesito hacer mi TFM' o algo por el estilo". Y no solo por la barra de búsqueda, sino que en redes sociales como Instagram utilizan publicidad dirigida a perfiles jóvenes y tienen cuentas abiertas desde donde puedes contactar con ellos.

En el caso de la página web que utilizó Noelia "aseguraban que contaban con gente especializada en cada materia, a la que le podías explicar todo y tener contacto con ellos para dar directrices de cómo querías el documento", asegura. Añade que, "incluso te dejaban pagar el trabajo en plazos".