Más de un millar de contribuyentes de Ontinyent están en paradero desconocido para la Diputación de Valencia. La institución provincial no ha podido localizarlos en los domicilios que constan en sus registros para notificarles la liquidación del primer recibo del Consorcio de Residuos (COR), correspondiente al servicio de tratamiento y eliminación de la basura desplegado entre agosto y diciembre de 2014.
La diputación ha publicado en su boletín oficial varios listados que incluyen páginas y páginas con el nombre y apellidos de los vecinos que no han sido hallados, citados a comparecer en los servicios de Gestión Tributaria de la sede de la entidad en Valencia al no haber sido posible la notificación del recibo en los últimos domicilios conocidos «por causas no imputables a la diputación». Los edictos difundidos el 20 de abril dan un plazo de 15 días a los interesados para personarse en las citadas oficinas. En caso contrario, transcurrido dicho periodo, la notificación «se entenderá por producida a todos los efectos legales», exponen los avisos.
Muchas liquidaciones no han llegado a sus destinatarios por los múltiples errores que contienen los padrones en poder de la diputación. El Ayuntamiento de Ontinyent se negó a facilitar los datos actualizados para retrasar el cobro. Pese a ello, la institución dio luz verde a la emisión de la tasa, empleando información en muchos casos desfasada. Entre finales de marzo y comienzos de abril, Correos comenzó a notificar el recibo en los hogares y negocios de la ciudad, cuyos vecinos eran los únicos que hasta ahora se había librado de la tasa dentro del área de gestión del Consorcio de Residuos, que abarca 5 comarcas.
La Plataforma del Fem ha puesto al servicio de los contribuyentes hasta cinco modelos de recurso para que presenten alegaciones. En caso de no abonar el recibo de la basura en el plazo establecido, los afectados se enfrentarán a recargos. El colectivo de ciudadanos ha manifestado su «indignación» por el «trato» recibido. «En muchos casos que encontramos en los listados se trata de errores en la dirección donde envían la notificación. Muchas de esos errores ya fueron notificados específicamente a la diputación en la revisión del padrón fiscal en marzo», apuntan fuentes de la Plataforma. «Además de no hacer caso a esa revisión, sitúan ahora a los ciudadanos en una situación muy complicada e inaceptable para una gestión normal de una tasa», lamentan.
Los errores son similares a los que se produjeron en las primeras liquidaciones que practicó la diputación en la Costera y la Canal, poco después de iniciarse la gestión del COR en estas comarcas, a mediados de 2012. La confusión en los padrones empleados y el uso de datos desfasados para identificar a los contribuyentes hizo que se incluyeran en el listado de notificaciones a titulares fallecidos, empresas en liquidación o casetas de aperos, entre otras incorrecciones.
Múltiples incorrecciones
En el resto de localidades de la Vall d'Albaida —donde el recibo comenzó a llegar en enero— ha ocurrido lo mismo. La liquidación se giró a cocheras o casetas sin luz ni agua. Decenas de propietarios tuvieron que alegar para corregir los fallos de las notificaciones.