Era un hecho extraordinario, casi sin precedentes —la última vez fue hace más de 60 años y muchos de los presentes no lo habían vivido—, excepcional, histórico. Bocairent celebraba el pasado sábado la Baixada del Crist de la ermita a la parroquia de la localidad, una bajada que no tenía lugar desde hace 63 años (1953) y ante el histórico evento la localidad se volcó. Cientos de vecinos asistieron a la bajada de la venerada imagen en un acto que superó cualquier expectativa, un acto multitudinario.
Tanta era la expectación y la emoción por la procesión que el primer grupo de personas subió a las 8 de la mañana para preparar la bajada. A lo largo de la mañana pasaron por la ermita incontables personas para visitar y tocar la imagen que ya aguardaba tumbada en los bancos, a punto para ser bajada a las cinco de la tarde. Tras la hora de la comida también fueron muchos los que se acercaron hasta el santuario en una jornada apacible y con buen tiempo, que motivo la presencia de numerosos fotógrafos dispuestos a inmortalizar un hecho singular.
A las cinco de la tarde, cohetes y el volteo de campanas avisaban de la salida del Crist desde la ermita, recibida por un gran aplauso por los bocairentins. La bajada estaba dividida para los portadores en 9 tramos —los mismos que la anterior bajada—, lo que posibilitó que grupos vinculados a la parroquia como los confirmantes, catequistas, la junta de la ermita, grupo de teatro l'Arcà, Festasa, la escuadra del 150 aniversario de los Granaders, los juniors de Sant Blai y personas particulares llevarán sin andas la imagen recostada. A la llegada al pueblo la recibió la música de la banda AUM Bocairent y la imagen del Crist fue levantada a su llegada a la plaza del pueblo. La entrada a la iglesia fue otro momento emotivo, entre aplausos por los cientos de vecinos dispuestos a celebrar el Any Jubilar de la Misericòrdia propuesto por el Papa Francisco, han explicado.
Tres semanas en la parroquia
La cruz con la imagen del Crist presidió la misa y más de un millar de fieles acompañó al santo a lo largo del trayecto. El Crist seguirá en la parroquia durante tres semanas y presidirá todos los actos que se celebren. En la Semana Santa tendrán lugar el Sant Tridu Pasqual de la pasión con la misa del Jueves Santo y un via crucis nocturno; el Viernes Santo será el oficio, pasión y muerte del Señor, adoración de la cruz y procesión del Santo Entierro; el Sábado Santo, la visita del Crist al cementerio parroquial y la vigilia pascual por la noche. La tercera semana en la que el Crist aún estará en la iglesia se celebrará un exposición de la réplica del Sant Sudari de Torí; una conferencia el martes 29 sobre El Rostre de Jesús, Rostre de Déu; y el viernes tendrá lugar el sacramento de la Santa Unció de ancianos y enfermos.
El sábado 2 de abril, a las 11:30, arrancará la procesión de subida a la ermita para que la imagen del Crist regrese a su lugar. Una comida de hermandad en los alrededores del santuario concluirá la programación contemplada para conmemorar la extraordinaria Baixada del Crist, después de más de seis décadas.