El Discóbolo cerrará el campo y la escuela

La amenaza del exilio pende sobre el Discóbolo-La Torre Atlétic Club. La histórica entidad valenciana, fundada en 1929, se ve incapaz de asumir los costes de mantenimiento de su campo, en la pedanía de La Torre, razón por la que su directiva ha tomado la decisión de clausurarlo antes de que empiece la próxima temporada. Eso implicará, además, cerrar la escuela de fútbol, con 110 niños matriculados, y buscar un campo municipal para que compitan el primer equipo masculino (en Regional Preferente) y el femenino (en Autonómica) y evitar la desaparición del club.

El problema del Discóbolo-La Torre AC nace hace 20 años. José Luis Santillana, presidente del conjunto franjirrojo, explica que en 1997 el equipo abandonó el barrio de Malilla y se instaló en La Torre a la espera de las prometidas instalaciones deportivas municipales para la pedanía. Mientras tanto, el club hizo frente a la construcción de un campo propio sobre unos terrenos que sólo en una parte eran municipales. Desde entonces, la entidad paga el mantenimiento de sus instalaciones (agua, luz, gas, el terreno de juego, los vestuarios...) y el alquiler de la franja privada del suelo sobre el que se asienta el campo. En total, según Santillana, el club debe abonar anualmente unos 30.000 euros sólo para tener el campo, llamado simplemente «La Torre», en condiciones aceptables.

En este punto, Santillana resalta que, desde el traslado a La Torre, el club recibía una ayuda económica directa pero no fija, las últimas de entre 5.000 y 7.000 euros, desde las arcas del Ayuntamiento de València. «No era una cantidad fija, pero con eso se parcheaba el año», dice.

Ese dinero, siempre según el presidente del Discóbolo-La Torre, iba destinado a sufragar los costes del terreno de juego. Y es que, esa cantidad, junto a los ingresos que proporciona la escuela de fútbol del club, suponían una inyección suficiente como para continuar con la actividad del club.

No obstante, desde el Discóbolo-La Torre AC se señala que esta ayuda económica ha sido denegada por el consistorio las últimas dos temporadas, desde el cambio de gobierno. A la ausencia de esa subvención se añade también que el club ha sufrido una grave avería eléctrica en el campo, que ha tenido que reparar con sus fondos.

Con todo ello y después de los problemas sufridos en estos dos últimos años, Santillana afirma que, sin el dinero del ayuntamiento, el club carece de los recursos económicos necesarios para mantener en funcionamiento su terreno de juego. «Ahora es inviable abrir las puertas del campo», sentencia.

Al respecto, los vecinos de La Torre han organizado hoy una protesta por la ausencia de instalaciones deportivas en el barrio, del que aseguran que es el único de toda la ciudad sin espacios para el deporte.

Cita con la Fundación Deportiva

Tres representantes del club de La Torre mantendrán una reunión el próximo jueves con el gerente de la Fundación Deportiva Municipal de València, José Vicente Berlanga, con el objetivo de buscar una salida al problema. Desde el ayuntamiento se apunta que no se puede invertir dinero público en clubes privados para el alquiler de terrenos privados, como sucede en el caso del Discóbolo-La Torre. Es más, se apunta que no se puede repetir la subvención económica del anterior gobierno municipal porque no cumple los protocolos establecidos ahora para estas ayudas.

Eso sí, se insiste en que se buscará una solución técnica y transitoria que contente a todas las partes hasta que se finalice la construcción de las instalaciones deportivas planificadas para el barrio, esto es, el polideportivo de Sociópolis.