El dinero para sanear las maltrechas arcas de Bankia saldrá directamente de los fondos del Estado en forma de una inyección económica directa de capital, por valor de 19.000 millones y no será un préstamo. Por tanto, la entidad bancaria no estará obligada a devolver el dinero ni a pagar ningún interés, tal como se había apuntado en los últimos días desde el Ministerio de Economía.

Ayer, el presidente del consejo del grupo BFA-Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, explicó en rueda de prensa que el rescate del cuarto emporio financiero más importante de España no se llevará a cabo ni mediante préstamos del fondo de rescate bancario -FROB- ni mediante bonos convertibles contingentes -los llamados cocos-, sino con capital directo. «No estamos hablando -dijo en sus declaraciones- de ayudas ni de aportaciones a fondo perdido; estamos hablando de capital; y será responsabilidad de los gestores sacarle valor a ese capital». «No hay nada que devolver», enfatizó a preguntas de los periodistas.

De esta forma el sucesor de Rodrigo Rato, dejaba en evidencia a la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, que había afirmado el pasado viernes que la nacionalización de la antigua Bancaja se iba a realizar a través de préstamos, al tiempo que el Ejecutivo promovería la venta de la entidad para recuperar estos créditos.

Sáenz de Santamaría decía también que las ayudas destinadas a recapitalizar Bankia iban a perseguir que el coste de su saneamiento fuera el «menor» para los ciudadanos. Ello a pesar de que se trata del mayor rescate bancario de la historia de España y que la cantidad destinada a Bankia, 19.000 millones más los 4.465 que se habían inyectado previamente, supera con mucho los 15.000 millones que pretendía destinar el ejecutivo de Mariano Rajoy a sanear toda la banca española.

Goirigolzarri dio detalles ayer de cómo se va a realizar el saneamiento pactado con el Estado. Primero, el FROB suscribirá una ampliación de capital por este importe en Banco Financiero y de Ahorro (BFA), la matriz de Bankia, posiblemente entre junio y julio. Posteriormente, en octubre, se realizará una ampliación de capital por 12.000 millones en Bankia, que es la empresa cotizada en Bolsa, y en la que los actuales accionistas tendrá derecho de suscripción preferente.

En caso de que ninguno de los accionistas minoritarios acuda a la ampliación, BFA tendrá que suscribir los 12.000 millones de la ampliación, cifra que ya está contemplada en los 19.000 millones solicitados. Por ende, el presidente de Bankia se mostró «seguro» de que el Estado conseguirá el dinero solicitado ya que se trata de una «solución compartida» y tomada «en equipo» con el Gobierno. Eso sí, aún no se ha explicado oficialmente de dónde van a salir los recursos para salvar el banco pues el FROB se quedó prácticamente sin recursos tras la subasta de la Caja Mediterráneo (CAM) y Unimm. Hoy, se cifra en unos 5.400 millones la liquidez disponible. ¿De dónde saldrá el resto del dinero?. Una de las opciones que tendría el Gobierno de Rajoy sería recurrir a la emisión de deuda pública.

Otra solución de emergencia, para lograr esta importante suma, -que debe tener disponible en pocas semanas para iniciar el saneamiento-, podría ser acudir al fondo europeo. Sin duda esta es la peor salida puesto que pondría al sistema bancario español al borde de la intervención europea y entonces habría que hablar incluso de un rescate global de la economía nacional.

Otro dato a tener en cuenta es que si los 19.000 millones de capital inyectados en Bankia, se consideran capital puro, computan inmediatamente como déficil público, lo que signicaría que España no podría cumplir con las previsiones de déficit que le reclama la Unión Europea dado que supondrían un incremento de casi un 2% del PIB, y un aumento de ese porcentaje descuadraría totalmente las previsiones del ministro Luis de Guindos. Esto también contribuiría a agitar más los mercados financieros y a agravar los problemas con la prima de riesgo.

El PSOE no avalará en blanco

Por último, el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, dijo ayer que si antes pedía que se depuren responsabilidades en el Parlamento, ahora lo exige, y que hasta que no las haya su partido no avalará que se dé «ni un euro público más». Rubalcaba subrayó que «tienen que ir al Parlamento los gestores» ya que un banco así «no se va al garete en un año».

Goirigolzarri justifica a Rato por el «entorno convulso»

El presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, justificó la labor de su predecesor, Rodrigo Rato, que tuvo que trabajar en un «entorno regulatorio convulso», y descartó que vaya a depurar responsabilidades en la entidad. «No he venido aquí a depurar responsabilidades», dijo Goirigolzarri para asegurar a continuación que su único objetivo «es crear valor para el accionista y mirar al futuro».

El ejecutivo dejó claro que no ha aparecido «nada irregular que justifique esta brecha», más allá del propio «deterioro del valor de los activos por la evolución económica y los cambios regulatorios». «Estos son los dos elementos que justifican una recapitalización, y nada más», recalcó. «Dicho esto, me parece importante que seamos prudentes en nuestros juicios», agregó Goirigolzarri, en referencia a las peticiones de investigación que han realizado algunos partidos políticos y asociaciones de usuarios.

El presidente ha insistido en este último punto, al recordar que durante el mandato de Rodrigo Rato se sucedieron diversas reformas de la normativa financiera que endurecieron las provisiones inmobiliarias y forzaron fusiones. «Mi predecesor tuvo que realizar una gestión en un entorno regulatorio convulso, en una situación económica convulsa», dijo a modo de disculpa.

Su objetivo, enfatizó, es convertir a Bankia en una entidad «sólida, eficiente, rentable y libre» para lo que han diseñado un plan de saneamiento y recapitalización por el que recibirá un total de 23.465 millones de euros de dinero público.

A su juicio, el plan de rescate programado es «serio, responsable y transparente», pues surge después de haber analizado primero todos los activos del banco.