De forma paulatina, acompasado a la recuperación económica, aunque también al desistimiento individual a inscribirse y a la emigración, el paro valenciano va perdiendo unidades. El pasado 2016 se cerró con 43.027 desempleados menos, con lo que la cifra de personas registradas en las oficinas del Servef está ahora en 418.963. Hay que remontarse a 2008, el año en que estalló en toda su crudeza la crisis iniciada en 2007, para encontrar un dato más positivo. Aquel ejercicio se cerró con 357.824 parados en la Comunitat Valenciana, casi el doble de los 215.693 que había un año antes. La cifra fue creciendo hasta alcanzar la cúspide en 2012, con 569.735. Así que en los cuatro años transcurridos desde entonces, la autonomía ha logrado reducir en 150.000 el número de parados. El descenso valenciano se enmarcó en un contexto en el que el desempleo se redujo en España en 390.534 personas a lo largo del año, la bajada más acusada de toda la serie histórica.

La caída anual se produce tras un diciembre en el que la Comunitat Valenciana redujo su paro en casi 6.800 personas, gracias, fundamentalmente, a la campaña navideña, que impulsó las contrataciones en el sector servicios. Al albur de la temporada citrícola, la agricultura contribuyó con 313 parados menos. Solo la construcción se anotó más desempleados, aunque solo 24.

Por el lado de la oferta, en la Comunitat Valenciana se suscribieron un total de 148.450 contratos en diciembre, 34.941 menos que el mes anterior (-19,05 %) y 5.511 más que en el mismo mes de 2015 (3,86 %), de los cuales 11.669 fueron indefinidos (65 de personas con alguna discapacidad), y 136.781, temporales, lo que implica mantener la dinámica de la precariedad. Paralelamente, la afiliación a la Seguridad Social en la autonomía experimentó una subida del 3,59 % en términos interanuales, ligeramente por encima del 3,12 % de la media anual. Eso se tradujo en 61.191 asociados más, tras un crecimiento de 5.550 en diciembre. En el conjunto de España, el aumento en 540.655 de 2016 fue el mejor resultado de la última década.

Tras conocer los datos, el secretario autonómico de Empleo, Enric Nomdedéu, aseguró que el año pasado ha sido «el punto de inflexión en la creación de empleo» en la Comunitat Valenciana. El sindicato CC OO-PV considera que la reducción del paro «sigue siendo insuficiente» y reclamó medidas concretas para que el impacto sobre el empleo «permita volver a las tasas de desempleo de antes de la crisis, un lejano 9 % que sonroja el 20 % actual». Para UGT-PV, los datos de 2016 se han visto ensombrecidos por la alta temporalidad del mercado de trabajo y la precariedad en la contratación como problema estructural.