"Los robots en Ford ayudan a ser más competitivos y no quitan puestos de trabajo"

El efecto de la robotización en el empleo, la inversión en inteligencia artificial, el manejo óptimo de los datos, las nuevas soluciones de movilidad y el modelo educativo del futuro. Estos son algunos de los desafíos que en opinión del director de Fabricación de Ford España, Dionisio Campos, plantea la revolución que estamos viviendo en la actualidad.

"Vivimos una evolución de los procesos industriales pero con una velocidad de cambio mucho mayor, lo que impide tener estabilidad", ha señalado Dionisio Campos en una nueva sesión del XXVIII Seminario Étnor, que aborda los Desafíos Éticos para la Empresa en un Mundo Digital. "Siempre ha habido datos pero no siempre los hemos aprovechado. En Ford tenemos robots colaborativos, sistemas de infrarrojos, de ultrasonidos que perciben lo que no escucha el oído humano. Con estos sistemas de innovación y los datos podemos llegar a la fábrica inteligente, que piense".

En su opinión, "dentro de 10 años los productos que fabricamos hoy tendrán un 30% menos de coste de producción y llegarán al usuario con menor precio". En este sentido, el alto directivo de la Ford ha señalado que los robots han estado con nosotros desde los años 50 y seguirán existiendo mientras que sean económicamente viables. "Los robots vienen a ayudar a ser más competitivos. No quitan trabajos, pero sí los transforman".

En este sentido, el director de Fabricación de Ford Almussafes, una de las factorías de automóviles más robotizadas de Europa ha señalado que "en la última reforma de Ford España instalamos 1.000 robots y contratamos a 3.000 personas. Tenemos robots colaborativos con tareas de ayuda que hacen trabajos repetitivos o funciones donde el ser humano no puede llegar. Hay que ser pioneros en la implementación de esos elementos tanto para servicios como producción".

"En estos momentos son herramientas de ayuda al trabajador. La tarea del operario está evolucionando, ha de cambiar hacia más creatividad y coordinación, con nuevas capacidades. Las tareas repetitivas van a ser cosa de robots, lo hacen mejor que los seres humanos. Y las organizaciones irán cambiando, el operador tendrá que tomar decisiones, habrá menos cargos intermedios y los operarios serán más decisivos", ha detallado.

Soluciones de movilidad

Respecto a las nuevas formas de movilidad, el directivo de Ford ha indicado que "estamos constantemente viendo las necesidades del entorno y hay que adaptarse al mercado. Por eso recientemente Ford compró una fábrica de patinetes. La gente valora su tiempo y en las ciudades hay que buscar soluciones al coche. Tenemos ya aplicaciones que proveen servicios útiles y soluciones a lo que el vehículo tradicional, con la evolución de las ciudades, no van a poder llegar".

Para Dionisio Campos la industria del automóvil está forzada a transformar motorizaciones para reducir los niveles de emisión. "La tecnología de combustión va a tener una transición ordenada, no se puede cambiar de la noche a la mañana. Vamos hacia el vehículo eléctrico pero estos vehículos también tienen inconvenientes, por lo tanto hay que hacer una evolución ordenada".

"Ford está en proceso de transición hacia lo que pide mercado y esto acarrea ajustes que hay que tomar lo antes posible. En Almussafes ajustaremos la producción en función del mercado. Tenemos que adaptarnos en el momento en el que el mercado lo requiera. Los vehículos que lanzaremos van hacia la hibridación, con 40 modelos de estas características, de los cuales 16 serán totalmente eléctricos. Esta transición conlleva cambios y ajustes, y si hay que tomar decisiones lo vamos a hacer lo antes posible", ha concluido Dionisio Campos.

Por su parte, el periodista y director de Innovadores by Inndux, Eugenio Mallol, ha defendido la necesidad de integrar cultura e innovación. "En estos momentos necesitamos a gente de la cultura en la innovación y la empresa. Estados Unidos y Reino Unido van a la cabeza de inversión en inteligencia artificial y se están planteando debates éticos en la innovación. España debe tener voz en ese debate, con la aportación más necesaria que nunca de la cultura".

Otra de las cuestiones cruciales es qué modelo educativo encaja en esta revolución que estamos viviendo. Tanto Mallol como Campos han coincidido en que tiene difícil encaje porque "la revolución se caracteriza por su velocidad y la realidad es que desde que se adapta un grado hasta que salen los primeros jóvenes pasan al menos cuatro años, y puede estar ya desfasado con la realidad del mercado. La industria tiene una necesidad de formación continua, integrando nuevos procesos día a día, y la universidad y la empresa deberían acercarse para ofrecer una formación cada vez más especializada y menos generalista".

El acto, celebrado en el Centro Cultural Bancaja, ha sido presentado por el presidente de la Fundación Étnor, Enrique Belenguer, quien ha agradecido la presencia de los invitados y del numeroso público, y moderado por la directora general de Industria y Energía, Empar Martínez. Bajo el título Desafíos Éticos para la Empresa en un Mundo Digital, el XXVIII Seminario Étnor trata combinar la reflexión a través de las ideas con la práctica, en un entorno empresarial cada vez más digitalizado, abordando la realidad empresarial y sus decisiones éticas.