El transporte marítimo reduce su capacidad de carga durante este verano de forma substancial para adaptar los buques a las exigentes normas sobre el cambio climático. En medio de los incertidumbres provocadas por la batalla comercial entre Estados Unidos y China, lo que tendrá sin duda repercusiones en los intercambios de bienes entre puertos interoceánicos como Valenciaport, aumenta la sensibilización ante la urgencia del cambio climático de las navieras, puertos y terminales; cada vez mayor en el ámbito del transporte marítimo internacional.
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Así las cosas, aumentan las retiradas temporales de buques en navegación para adaptarlos a las normas de la Organización Marítima Internacional -obligatorias para todo el sector- que entrarán en vigor en 2020 y que exigen ejecutar diversas modificaciones en sus motorizaciones y filtros, entre otros elementos, para evitar la emisión de gases. Estos cambios legales ya comienzan incluso a generar efectos detectables en el mercado marítimo y en el coste de los fletes, según las primeras apreciaciones del VCFI (el Valencia Containeraised Freight Index) del mes pasado.
Según fuentes de Valenciaport, en julio se aprecia un «importante crecimiento en la flota ociosa de portacontenedores» que, atendiendo a datos de la consultora Alphaliner crece hasta 138 unidades, lo que representa 486.778 TEU, frente a los 336.241 de finales de junio, lo que supone un aumento del 44 %. Además de posibles ajustes de oferta y demanda, este incremento se debe principalmente a la entrada en astillero de los buques para la instalación de filtros en la emisión de humos, en previsión a la entrada en vigor en enero de 2020 de la nueva normativa en materia de emisiones aprobada por la Organización Marítima Internacional. La expectativa es que durante los próximos meses esta tendencia se mantenga y las navieras continúen adaptando su flota para el cumplimiento de la regulación en el contenido de azufre de los combustibles marinos.
Planes de empresas
Se trata de unas normas a las que se están adaptando con celeridad las navieras, según los informes que maneja Valenciaport; incluso con inversiones adicionales que implican sustitución de combustibles y motorizaciones de buques ante la cada vez más compartida sensibilización de puertos y terminales para hacer frente y con urgencia al cambio climático. La norma IMO 2020 de la Organización Marítima Internacional entrará en vigor el 1 de enero del próximo año y limitará el contenido de azufre en los combustibles para el transporte marítimo al 0,5% frente al 3,5% permitido actualmente.
Una de las navieras que se ha tomado en serio esa adaptación al cambio climático es Baleària. La empresa con sede social en Dénia invertirá 200 millones en su flota de alta velocidad. El presidente de Baleària, Adolfo Utor, anunció el año pasado el desarrollo de los dos primeros barcos de alta velocidad propulsados con motores de gas natural licuado. Según Utor, la alta velocidad vive ahora un «reverdecer» motivada por un descenso de los costes del petróleo y porque a partir de 2020 todos los ferries van a tener que utilizar gasoil o gas, debido a la entrada en vigor de la nueva norma de reducción de gases contaminantes. De hecho, Baleària trabaja también en reconvertir cinco de sus ferries con fuel a gas.
Fletes de Valenciaport
Es proceso de modernización de la flota incide ya en los fletes de exportación desde Valenciaport, que expresados en euros crecen un 0,98% en julio con respecto al mes anterior. Así lo refleja el Valencia Containeraised Freight Index, un índice de referencia para el sector y que toma un valor de 1.066,79 puntos, siendo enero de 2018 la base del índice, fijada en los 1.000 puntos. El crecimiento acumulado de este indicador desde sus inicios es del 6,67% mientras que si se considera exclusivamente el 2019, el VCFI ha experimentado una variación cercana al -2,9%.
En términos globales, el comportamiento del precio del barril del petróleo durante el mes de julio ha sido bastante estable, cerrando en un nivel de 63,91 dólares el barril frente los 64,22 dólares del mes de junio. Esta evolución es coherente con las perspectivas de los principales analistas que auguran un segundo semestre en el que la contracción económica generaría una menor demanda que compensaría el riesgo alcista de las tensiones geopolíticas asociadas al mercado del petróleo.
Las empresas participantes en el VCFI son Alonso Pricing, Arkas, Cosco Shipping, Cotunay, DAL Grimaldi, Grupo Raminatrans, K Line, MSC, Savino del Bene, TIBA y White Line Shipping.