El presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Antonio Garamendi, cree que no tiene por qué haber una sola fábrica de baterías para coches eléctricos (a la que aspira Valencia) sino que «podría haber una, dos o tres fábricas», dado que se enmarcan dentro de «macroproyectos» que aspiran a obtener fondos europeos, pero en todo caso ha defendido que «la economía funciona porque hay competencia». Por su parte, el presidente Pedro Sánchez defendió el compromiso del Gobierno con la inversión en el sector de la automoción en todas las comunidades autónomas tras el polémico anuncio de que la primera planta de baterías eléctricas irá cerca de Martorell (Barcelona) y estará ligada a Seat. Así respondió Sánchez a una pregunta del diputado de UPN Sergio Sayas, que, durante la sesión de control al Gobierno en el Congreso, pidió al jefe del Ejecutivo que asumiera un compromiso con Navarra y su industria automovilística en materia de coche eléctrico. En este punto, el jefe del Ejecutivo reafirmó el compromiso con la inversión en automoción en todas las autonomías.

Por su parte, el líder de la patronal española, subrayó que los fondos europeos «son para el Estado español, para macroproyectos que en muchos casos son transversales». Así, «la fábrica de baterías viene por un macroproyecto de construcción de coches eléctricos pero podría haber más proyectos», señaló. Garamendi realizó estas declaraciones al ser preguntado por si considera compatible que haya más de una fábrica de baterías en España, después de que a la gigafactoría liderada por Power Electronics que se proyecta en Valencia le hayan surgido competidores en otros territorios.

Según el líder de la patronal española, los fondos europeos «son para el estado español, para macroproyectos que en muchos casos son transversales».

El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, resaltó que el proyecto de factoría de Power Electronics es diferente al que plantean otros territorios porque está vinculado a muchos sectores, no solo al del automóvil. Puig expresó la confianza del Gobierno valenciano en la megafactoría y en la empresa que lidera el proyecto y aseguró que nace de la fortaleza de Power Electronics y cuenta con la participación de una veintena de empresas -Ford entre ellas- y con el apoyo de la Generalitat.

El presidente de la Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana (CEV), Salvador Navarro, destacó que la gigafactoría valenciana «va más allá de la automoción y tiene mucho más recorrido».