Tras un verano de asfixiante calor que ha contribuido sobremanera a provocar enormes incendios en la Comunitat Valenciana, singularmente los de Bejís y Vall d'Ebo, en los que se calcinaron más de 30.000 hectáreas, la conselleria de Agricultura prepara un plan piloto para tratar de revertir uno de las mayores mechas de fuegos como los citados: el abandono de cultivos. Se trata de incentivar la producción agraria y ganadera de parcelas que han dejado de estar en uso en zonas de montaña o de masa forestal y de incorporar nuevos terrenos para dicha utilización en esas áreas, según fuentes del sector.
La ganadería extensiva, es decir el pastoreo de ovejas y cabras, contribuye a limpiar las mencionadas zonas de hierbas que luego azuzan los fuegos, mientras que las parcelas de cultivo, singularmente los leñosos como el olivo, el almendro o el viñedo, ejercen una misión de parapeto ante el avance de los incendios. De ahí la importancia de adoptar medidas que contribuyan a incrementar la actividad en los alrededores de los bosques.
La iniciativa es pionera en España y pretende utilizar la fórmula de pago por servicios ambientales
Las fuentes consultadas aseguran que la iniciativa es "pionera" en España y la fórmula que se pretende utilizar es la de los pagos por servicios ambientales "que se ajusta a una legislación comunitaria, que, en su nueva Política Agraria Común (PAC), refuerza precisamente la adopción de medidas orientadas a la preservación del medio ambiente", según las mismas fuentes. El proyecto se encuentra en una fase incipiente pero la idea sería abonar una cantidad determinada por cada hectárea que se habilite para actividades agrarias o ganaderas. Uno de los objetivos principales es conseguir la implicación de agricultores, cooperativas y empresas, que, a la postre, serían las que tendrían que hacerse cargo de las explotaciones.
Apoyo
La propuesta de la conselleria de Agricultura cuenta con el beneplácito del presidente de la Generalitat, Ximo Puig, quien ha dado luz verde a que se diseñe un estudio detallado sobre su viabilidad y posibilidades. De hecho, en la reunión mantenida esta semana con representantes del sector, el jefe del Consell ya planteó la necesidad de articular una "alianza entre agricultura y medio ambiente", dentro de la cual se incluiría la mencionada iniciativa. Además, cuenta con el respaldo a priori de las organizaciones agrarios, que llevan años clamando contra el abandono de campos y las consecuencias que este tiene sobre el medio rural.
