El Consorcio Valencia Interior, que gestiona los residuos de 61 municipios de cinco comarcas de interior de la provincia de València, está desarrollando un programa que persigue la prevención en la generación de los residuos. Se trata del proyecto de compostaje que se desarrolla en el ámbito doméstico, comunitario y en los centros escolares del área consorciada. Este ambicioso proyecto permite reducir la cantidad de residuos que llegan a planta mediante el procesado natural de los biorresiduos: economía circular en estado puro. Las propias composteras están fabricadas ad hoc con el plástico que se recupera en las plantas de tratamieto del CVI.

Este programa de compostaje doméstico se está desarrollando, por un lado, en zonas de baja densidad poblacional (aldeas y municipios pequeños en las comarcas interiores) de modo que permite racionalizar las rutas de recogida de la fracción resto; por otro lado, se pone en marcha en urbanizaciones como complemento voluntario al sistema de gestión de residuos actual. En tercer lugar, se está implantando en municipios con habitantes muy diseminados en pequeños núcleos y escasa población.

El proceso es muy sencillo: Las familias interesadas en participar se inscriben a las charlas informativas en la que se explica cómo compostar en casa y los beneficios de formar parte de este proyecto. A continuación, se suscribe un compromiso con el CVI que les hace entrega de un compostador con un código QR para su vivienda. Una vez las familias se descargan la APP pueden recibir asesoramiento personalizado por parte del equipo de educación ambiental, registrar las aportaciones de residuos a la compostera y consultar sus dudas. En definitiva, se pretende que se sientan acompañados en este proceso de gestión de residuos que, en la mayoría de los casos, es nuevo para ellos. El proyecto contempla la formación, la entrega del compostador y el acompañamiento para que el proceso sea un éxito.

La crisis del COVID ha provocado un cambio en los protocolos de formación y entrega de los compostadores. Levante-EMV

La campaña general se inició en septiembre de 2017 con una prueba piloto en el centro educativo IES/CRA Rincón de Ademuz, en Ademuz. Desde esa fecha hasta la actualidad se han realizado un total de 63 charlas formativas en las que han participado un total de 1081 personas, se han realizado 87 entregas de material y se han distribuido más de 460 compostadores a familias de los municipios consorciados.

El CVI está desarrollando el compostaje también en los centros educativos, proyecto que recibe el nombre de Aula Composta. De hecho, como se ha mencionado anteriormente, los centros fueron los primeros en comenzar a implantar esta campaña transformadora en la gestión de los residuos en 2017. En este ámbito son los propios escolares los que colaboran en el depósito de los restos de comida en el compostador y, además, se pone en valor desde pequeños el arraigo de las raíces, a lo tradicional, a la economía circular. Los centros ofrecen también formación a las personas que trabajan en el comedor, de manera que toda la comunidad educativa está involucrada y comprometida. En la actualidad, Aula Composta se desarrolla en 17 centros escolares todo el ámbito del consorcio.

La crisis del COVID ha provocado un cambio en los protocolos de formación y entrega de los compostadores, pero aún así se sigue desarrollando esta labor con éxito. Tanto las formaciones como la entrega de los compostadores se hacen siguiendo los protocolos establecidos y manteniendo las distancias de seguridad. El CVI asume el coste de las labores de formación, la distribución de las composteras y el acompañamiento en la gestión de los biorresiduos.

Desde 2017, el CVI ha realizado un total de 63 charlas formativas en las que han participado un total de 1.081 personas. Levante-EMV

El compostaje se centra en la prevención de los residuos, ya que se transforma la materia orgánica en compost de calidad que puede usarse en el propio jardín, con lo cual el residuo ha pasado de ser residuo a convertirse en un recurso. Este programa está adaptado a la realidad concreta de cada zona y a la nueva realidad post coronavirus, como forma de gestión de los biorresiduos dentro de la planificación local y con el fin de ejercer una importante labor de prevención. Por el momento el CVI está desarrollando el compostaje en dos ámbitos: en los centros educativos y con la ciudadanía en general; el compostaje comunitario en Alpuente está muy avanzado y se prevé ponerlo en marcha a la mayor brevedad posible.

Con el compostaje, el Consorcio Valencia Interior suscribe su propio compromiso en la prevención de los residuos, puesto que se consigue que los biorresiduos se conviertan en recursos, principio básico de la economía circular.