La dirección del Partido Popular retomará hoy sus reuniones semanales de los lunes y sus trabajos ante el intenso otoño que se presenta, con la vista puesta en las elecciones vascas del 21 de octubre y en la campaña que prepara para defender las medidas económicas del Gobierno.

La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, presidirá este mediodía en la sede nacional del partido esta reunión en la que están convocados cada semana los tres vicesecretarios generales -Carlos Floriano, Javier Arenas y Esteban González Pons-, el portavoz en el Congreso, Alfonso Alonso, el del Senado, Xosé Manuel Barreiro, y el del Parlamento Europeo, Jaime Mayor Oreja.

Los dirigentes populares celebraron su última reunión semanal el pasado 16 de julio, ya que el 23 no hubo y el 30 fue la celebrada entre el presidente del Gobierno y del partido, Mariano Rajoy, y los presidentes autonómicos.

Pese al tiempo pasado desde la última reunión, fuentes del PP han subrayado a Efe que la secretaria general, María Dolores de Cospedal, y los demás dirigentes han seguido trabajando este verano -cada semana ha estado de guardia un dirigente- y han mantenido contactos entre ellos y con el Gobierno de Rajoy.

Además de hacer un repaso a la actualidad económica, la dirección del PP tendrá entre las principales cuestiones a tratar la campaña electoral vasca, y empezará a estudiar la de los líderes nacionales en los actos del partido, así como el mensaje con el que se quiere buscar el apoyo en las urnas en un momento en el que los populares no parten, según las encuestas, en muy buena posición.

Por otra parte, al equipo de Cospedal le espera la labor de organizar la campaña explicativa que los populares quieren hacer en otoño sobre las medidas económicas y las reformas que está acometiendo el Gobierno con el objetivo de salir de la crisis.

El vicesecretario general de Organización y Electoral del PP, Carlos Floriano, anunció recientemente a Efe, que el partido quiere mantener reuniones al "máximo nivel" con los sectores afectados por medidas tomadas, y con todo tipo de organizaciones, incluidos los sindicatos, a los que pedirá su "complicidad".