Si el turista que visita la Comunitat Valenciana quiere visitar pueblos con encanto, Vilafamés es uno de los de visita obligada. Y es que esta pequeña localidad de la provincia de Castellón, a sólo 25 kilómetros de la capital, forma parte del listado de ‘Los Pueblos Más Bonitos de España’ desde el año 2014. El encanto de sus calles, el cuidado del paisaje y el carácter de su gente son tres de los elementos que lo mantienen en este listado ininterrumpidamente. Todo esto y más convierten a Vilafamés en uno de los pueblos más bonitos de España.
Pueblos bonitos: el municipio valenciano que sorprende por el tesoro geológico que alberga
El término municipal de Vilafamés alberga diferentes enclaves que cuentan, desde 2005, con la denominación de Bien de Interés Cultural (BIC) en la categoría de conjunto histórico. Uno de ellos es su casco histórico, que alberga algunas de las joyas del patrimonio local como son su castillo, sus murallas y sus torres. Pasear por sus calles tranquilamente nos transporta a sus orígenes árabes con calles estrechas y zigzagueantes, así como rincones que hacen que uno se quede maravillado.
La Roca Grossa es uno de los monumentos naturales que más llaman la atención cuando uno pasea por el pueblo. Situada justo a los pies de la iglesia parroquial, a medida que subes por la calle principal toma todo el espacio y es que se trata de una piedra colosal de 2.163 toneladas de peso, 832 metros cúbicos y una inclinación de 34 grados sobre el estrato; y como a toda joya natural que se precie, le acompaña una leyenda: se pueden pedir hasta tres deseos ante la enorme piedra, de los cuales se verá concedido tan solo de ellos.
Además, Vilafamés cuenta con otros puntos de interés como son la ermita de San Miguel, la iglesia de la Sangre, el Palacio Batlle, la Iglesia parroquial, la sala Quatre Cantons, el Quartijo o la ermita de San Ramón.
Las dimensiones de Vilafamés permiten que todo esté al alcance de la mano, como la visita a su Museo de Arte Contemporáneo que, con cincuenta años, es uno de los más importantes; o conocer los numerosos yacimientos arqueológicos que se encuentran en su término municipal, como la Cova de Dalt del Tossal de la Font o las pinturas rupestres en el Abric del Castell, con más de 80.000 años de antigüedad.
El municipio es un destino, también, para los deportistas, ya que cuenta con más de 60 kilómetros de senderos y rutas cicloturistas que llegan incluso a la playa, a sólo 20 minutos del casco urbano. No hay que olvidar tampoco la variada y continua oferta cultural, gastronómica y enológica. Un ejemplo es el Festival Internacional de Cine con tres ediciones celebradas.
En definitiva, Vilafamés es uno de los tesoros que esconde la Comunitat Valenciana y bien merecen una visita.