La Policía Nacional ha sancionado con 600 euros a tres vecinos de la Coma por una infracción grave de desobediencia a agentes de la autoridad, por su participación el pasado 24 de mayo en la manifestación celebrada en el entorno de las Corts Valencianes, para lanzar un grito de auxilio y reivindicación para el barrio.
En total se manifestaron alrededor de un centenar de personas, pertenecientes a colectivos, asociaciones y fundaciones que trabajan en el barrio de la Coma. La marcha recorrió las calles Serranos, Navellos, Caballeros hasta las proximidades de las Corts.
Según explica uno de los sancionados en su recurso de alegaciones presentado ante la Delegación del Gobierno, se le acusa de un acto de desobediencia que califica de «falso» e «incierto». Así, relata que con la concetración «finalizada y desconvocada vía megáfono, un agente requirió que le entregará el DNI, cosa que hice sin objeción». A continuación, según el recurrente, el agente en cuestión «me dijo que no podía transitar por la calle en el sentido en el que nos dirigíamos -hacía el río para coger el metro de regreso a Paterna-. No atravesé ninguna barrera policial, solo manifesté que pensaba que como ciudadano libre tenía derecho a transitar por donde quisiera. Lógicamente ante la coacción física que supone la presencia de un intimidatorio contingente armado, me retire y tuve que variar mi itinerario», relata en su escrito. Así, asegura que los dos requerimiento que le hizo el agente (DNI y variar el itinerario), «fueron obedecidos» por lo que el «hecho de participar en una concetración disuelta en el momento de los hechos no puede ser causa de sanción». Por ello, el sancionado sostiene que «estamos ante un intento de criminalizar y sancionar a ciudadanos que ejercen sus derechos».