El departamento de salud de Manises se ha quedado con una sola patóloga, tras ser despedido el jefe de servicio y haber renunciado una compañera. El Sindicato Médico (CESM) ha anunciado que denunciará la precaria situación ante la Inspección de la Conselleria de Sanitat y ante Trabajo, y no descarta acudir a los tribunales.
El departamento de salud de Manises, que gestiona la firma privada adjudicataria del hospital, atiende a 195.000 habitantes de 14 poblaciones, entre ellas Manises, Quart de Poblet, Manises y Aldaia. Según el CESM, en una década han pasado por el servicio hasta 34 patólogos, especialistas en el análisis de los tejidos enfermos, ya fuera una simple verruga como un tumor, de los que ninguno permanece.
El vicesecretario del CESM, José Iranzo, explica que la gota que ha colmado el vaso ha sido el despido del jefe de servicio de Patología del hospital, el doctor Severino Rey. Según Iranzo, la empresa que presta el servicio de patología para el hospital, ha incoado un expediente a Rey «plagado de acusaciones falsas organizando una venganza pseudomafiosa contra este profesional que se limitó a denunciar de buena fe una serie de deficiencias que mermaban la calidad de la atención».
El CESM ve «venganza»
El vicesecretario del CESM relata que el sindicato «puso en conocimiento del Hospital de Manises las deficiencias en las instalaciones de dicho Servicio: falta de reactivos y maquinaria estropeada durante un año sin reparar, falta de personal, un lugar de trabajo de los facultativos pequeño y sin ventilación, un depósito de cadáveres enfrente del almacén del Servicio de Farmacia sin ninguna barrera física que impida el libre acceso al mismo desde dicho almacén, una sala de autopsias en la que no existen las condiciones de bioseguridad microbiológica…». El CESM señala que la gerencia del hospital descargó la responsabilidad en la subcontratada. Días después de esa respuesta, la mercantil comunicó a Severino Rey que «se le apartaba del servicio al haberse iniciado contra él un expediente contradictorio, expediente que cuatro días más tarde se tradujo en un despido disciplinario».
Al despido del jefe de servicio de patología se une el abandono de otra patóloga en solidaridad con Rey y firmante también de uno de los varios escritos que se enviaron a la dirección de dicho hospital. «En el momento actual, el Departamento de Manises dispone solo de una patóloga para atender toda la actividad del mismo», alertan desde el Sindicato Médico.
Por tanto, José Iranzo insta al Hospital de Manises a tomar decisiones para garantizar el funcionamiento del Servicio de Anatomía Patológica, pero ya avanza que el CESM «va a presentar denuncias ante la Alta Inspección de la Conselleria de Sanitat, así como ante la Inspección de trabajo, y no se descarta acudir a los tribunales ordinarios tanto por el incumplimiento de la ley de PRL por parte de la subcontrata, como por las calumnias vertidas contra un profesional de una trayectoria tan intachable». Iranzo resalta que Severino Rey figura «entre los 100 mejores patólogos del mundo, ha trabajado en algunos de los hospitales más importantes de los EEUU o ha sido asesor del gobierno chileno».
Amenaza de denuncia
El doctor Iranzo denuncia que «no solo se incumple la legislación en materia de prevención de riesgos laborales, sino lo que es más grave, con este despido injusto se intenta humillar de forma miserable a un excelente profesional con el fin de dar un escarmiento e intimidar al resto de trabajadores. Una especie de omertá que evite cualquier tipo de denuncia de deficiencias, y todo ello con el silencio inaudito, por lo menos hasta ahora, de la Conselleria de Sanidad. Ante eso CESM se va a posicionar con todos los medios a su alcance y nos tendrán enfrente», avisa.
Por su parte, fuentes oficiales del hospital de Manises, a preguntas de este periodico, derivaron la responsabilidad de la situación que atraviesa el Servicio de Anatomía Patológica, en la empresa con la que tiene subcontatrado dicho servicio, tal como ya hiciera ante las deficiencias denunciadas por el CESM.
Sanitat sigue sin designar un nuevo comisionado
El Comisionado que debe fiscalizar la gestión de la concesionaria del área de salud de Manises lleva desde finales de octubre sin su máximo responsable, tras su jubilación. Tal como avanzó este diario, el comisionado es la figura designada por la conselleria de Sanitat para controlar la atención sanitaria que presta la empresa que gestiona el hospital. Fuentes de Sanitat señalaron hace días que se estaba últimando en encotrar el perfil ideal para el puesto. El comisionado también es el responsable de atender y rubricar las peticiones que realizan los usuarios del área de salud, así como las quejas que presentan por los vecinos.