Las calles de Sagunt se volvieron a llenar de alegría con la cabalgata fallera que reunió a las comisiones que plantan sus monumentos tanto en este núcleo de población como en los municipios de Faura y Gilet, quienes vienen participando en este evento organizado por la Federación Junta Fallera de Sagunt (FJFS) desde hace algunos ejercicios y que estuvo presidido por las Falleras Mayores, Paula Marrón e Inés Miret.
La calidad de los disfraces se pudo ver en la gran mayoría de las fallas, destacando los guerreros de la Atlántida de Gilet o los leones de la falla La Palmera, comisiones que, además, también apostaron por unas espectaculares coreografías que levantaron los aplausos de los espectadores que se encontraban durante el recorrido, que se inició en la avenida Doctor Palos para finalizar a las puertas del palacio consistorial saguntino.
También gustaron mucho los atrapasueños con luces de El Tronaor, el homenaje a la música de El Mocador o las brujas de La Vila cuya parte del disfraz estaba realizado con chapas de refrescos. También inspirado en la música, con partituras y piezas de un piano, fue el disfraz con el que Santa Anna rindió homenaje al Conservatorio de Música Profesional de la ciudad.
En cuanto a las carrozas, destaca el gran totem realizado por El Tronaor o el carruaje ambientado en el cuento de La Cenicienta realizado por los falleros de El Tabalet además de los monumentos europeos, alguno de ellos realizado también con material reciclado, que presentó la comisión El Romano o la carroza de la Atlántida, con movimiento incluido de Gilet.
Así pues, complicado lo tendrá el jurado, integrado por personas especialistas en la materia, para elegir los mejores disfraces, carrozas, coreografías y comparsas de esta cabalgata que, como sucedió con la que tuvo lugar siete días antes en el Port de Sagunt, destacó quizás por su extrema lentitud que hacía que, por ejemplo, en la plaza Blasco Ibáñez hubiese comisiones paradas hasta un cuarto de hora.
La cabalgata duró casi cuatro horas, dede las 17 a las 21 horas y por mucho que Protección Civil y los miembros de FJFS intervinieron para agilizar, la comitiva fue muy lenta y con muchos parones.
En cuanto al alcohol, es cierto que cada vez se va viendo en menor medida en un evento que, año tras año, va ganando en calidad tanto en atuendos como en coreografías.