La escultura de la «Loba Capitolina» está considerada como el símbolo de Roma y es uno de los regalos que, durante décadas, ha hecho esta ciudad a otras poblaciones vinculadas a ella. Segovia, Tarragona o Pisa son algunas de ellas; todo un listado donde Sagunt puede aspirar a entrar, tal y como ha propuesto el Centro Arqueológico saguntino en una carta remitida al alcalde, el socialista Darío Moreno.

En concreto, la entidad solicita que el ayuntamiento adopte un acuerdo y pida a Roma una reproducción de la «Loba Capitolina», comprometiéndose a ubicarla en un lugar «idóneo y representativo de la ciudad»,d e modo que esa imagen «testimonie y recuerde» la vinculación de la ciudad a Roma, a su Senado y a su pueblo, «de cuyas virtudes nos sentimos herederos».

Se trata de una iniciativa que ha canalizado el Centro Arqueológico pero que en realidad nace de «entidades culturales y de un numeroso colectivo de saguntinos», como explicaba a Levante-EMV su presidente, Amadeo Ribelles.

De ese modo, se pretende lograr todo un «símbolo» que reforzaría el nombramiento de Sagunt como Capital Valenciana de la Romanización, que aprobaron por unanimidad en Les Corts en enero de 2016.

La donación de réplicas de la «Loba Capitolina» a ciudades con vínculos con Roma es una práctica que la capital italiana ha llevado a cabo con algunos enclaves con los que le une un pasado común. Su elección no es casual pues es una escultura de bronce atribuida a talleres etruscos o de la Magna Grecia del siglo V a.C. y evoca a la leyenda acerca de los orígenes de Roma, con Rómulo y Remo amamantados por este animal.

En el caso de Sagunt, esto ha quedado plenamente acreditado desde antes de la segunda Guerra Púnica que enfrentó a Roma con Cartago pero, sobre todo, tras un hecho clave: La destrucción de Sagunt por parte del ejército de Aníbal, mientras el Senado discutía las medidas a tomar. Desde el Centro recordaban asimismo la reconstrucción por parte de Escipión y que Roma concedió a Saguntum el estatuto de ciudad federada e integró a sus élites ibéricas. Además, resaltaban los esfuerzos realizados desde hace años para poner en valor todo el legado patrimonial que dejó este periodo en la ciudad.

Por ello, con la confianza de que la solicitud de Sagunt está bien justificada por su histórica vinculación, desde el colectivo se espera lograr el respaldo municipal para así reforzar más aún los lazos con el mundo romano.