Progressar significa no cometre els mateixos errors del passat i emprar el més valuós que t´ofereix la tradició, per aconseguir avançar amb fermesa des dels teus propis recursos. És per això que he trobat interessant extractar parts d´aquesta carta remesa al 1969 per un ciutadà al director d´un diari del moment:

«Vivo en lo más típico de la huerta valenciana, que pronto, si no se toma una solución, dejará de ser la huerta y todo por la idea de construir sobre ella el Instituto Politécnico. Mucho me temo que en absoluto se han parado a meditar sobre el alcance de las consecuencias que son muchas y horrorosas. Valencia está siendo privada a marchas forzadas de su huerta, que tanta fama en el mundo entero le ha dado y que a este paso pronto ya sólo quedarán el recuerdo de esa huerta y de sus típicas barracas. De este sector van a ser desalojadas más de 200 familias, de las cuales más de 170 son labradores, que dependen exclusivamente de estas tierras que en su inmensa mayoría no son propiedad suyas, sino que son arrendadas.

Aunque el arriendo de estas tierras viene desde hace muchos años, algunos bastantes más de cien, ya que ha sido la única herencia que les han podido dejar sus antepasados. Ahora que el labrador de la huerta valenciana empezaba a gozar de un bienestar y un nivel de vida apropiados para un trabajo tan rudo y de rendimientos tan inciertos, debido a la pérdida de cosechas y algunas veces a la mala cotización de sus productos; ahora se les priva de estas tierras que son la única fuente de ingresos de que disponen, y que tantos sudores les ha costado conservar hasta estos días.

El problema sigue, ¿A dónde va a ser destinada toda esta gente, a fin de que puedan seguir viviendo como hasta ahora? Estos solamente son parte de los problemas creados por la decisión de construir aquí el Instituto Politécnico, estoy completamente convencido, y al igual que ya mis vecinos, de que si se hubiese calculado mejor la magnitud del problema creado, no hubiese optado por esta ´solución´. Señores, estas y otras muchas razones, son por las que el Ayuntamiento de Valencia debería de cambiar la ubicación del Politécnico; ahora todavía se está a tiempo. F. Navarro.»

Actualment, els problemes als que ens enfrontem amb la Revisió Simplificada del Pla General d´Ordenació Urbana de València, van més enllà, afectant al que ja està considerat com un important bé cultural com és l´horta.

Aquest document, malauradament planteja entre altres creixements urbanístics, la desaparició d´una part important de l´Horta de Vera junt al límit amb la partida Calvet d´Alboraia. Per tant, els gestors de la Universitat Politècnica de València, com a símbol de coneixement i innovació, haurien d´oposar-se totalment -també al seu reaprofitament- a que el planejament condemne una vegada més a que aquesta cresca a costa d´un dels nostres patrimonis amb més valors i més reconeguts que posseïm. Perquè «Horta és futur».