No existe ninguna evidencia de contagios de covid-19 en el sector cultural; en cines, teatros, exposiciones? se toman las más estrictas medidas y, sin embargo, este es uno de los sectores más golpeados y menos considerados de la crisis que estamos viviendo. Verán, la semana pasada acudí a una conferencia en la Biblioteca Nacional: nos tomaron la temperatura, nos limpiamos las manos y nos sentaron con distancia de otros por hasta tres asientos. El aforo era mínimo para un salón enorme y las medidas precisas y cuidadas. La conferencia se ofrecía presencial y digitalmente. Seguro que saben de lo que hablo porque en la cultura se está cuidando de cumplir con las normas al extremo. Por eso nadie entiende que no haya medidas decisivas para apoyar al sector del que dependen más de 700.000 empleos. A finales de 2019 publicaba el Anuario de Estadísticas Culturales (estadística oficial del Ministerio de Cultura) que crecía un 3,6 % el número de empresas dedicadas a la cultura, y que este sector aportaba un 3,2 % al PIB y, sin embargo, obtenía una financiación pública en términos de PIB del 0,06 % por parte del Estado.
La cultura crea ciudadanía crítica, reflexiva y, sobre todo, en los tiempos que estamos viviendo, nos permite pensar nuevas realidades, es un subterfugio y nos invita a imaginar qué mundos vendrán después de este. Sabemos del potencial humano de la cultura cuando recordamos lo que escribían, por ejemplo, Mary Shelley, Rosario de Acuña, Eduardo Galeano, Gloria Fuertes? o las obras de Delacroix, Louise Bourgeois, Maruja Mallo, Duchamp? Si queremos seguir construyendo una historiografía del arte que incluya pensamiento, reflexión y grandes obras que, a futuro, hablen de cómo somos y de lo que hemos vivido, la apuesta por apoyar la cultura tiene que ser decisiva desde todas las instancias, desde la ciudadanía de a pie (compre libros en su librería cercana, vaya al teatro?) hasta las administraciones locales y nacionales. La cultura es segura: lo es hoy respecto a la pandemia pero es cultura segura en valores sociales y humanos, en espíritu crítico, en pensamiento? en futuro. No dejemos que el covid-19 arrase con ella.