La primera vivienda que el Ayuntamiento de Alzira expropió al inscribirla en el Registro Municipal de Solares y Edificios a Rehabilitar ya tiene comprador. El gobierno municipal informó ayer de que los propietarios del inmueble vecino han realizado una oferta de compra, dentro del procedimiento de venta forzosa iniciado, lo que permitirá dar una solución a un inmueble que se encuentra en ruinas, lo que provocó que el ayuntamiento tuviera que intervenir en la fachada para evitar riesgos sobre la vía pública. Se trata de una pequeña casa ubicada en la calle Reyes Católicos.
El Ayuntamiento de Alzira formalizó la inscripción de esta vivienda en el registro hace dos años, tras no haber podido localizar al último propietario de un inmueble muy deteriorado que estaba generado problemas a los colindantes y en la vía pública. La inclusión de la casa en este registro municipal priva al propietario de actuar sobre él y abre la puerta a que cualquier interesado presente una oferta para adquirirlo. Se trata del mismo procedimiento que se ha utilizado para expropiar casas a las bancos en l'Alquerieta, aunque en ese caso ha sido el ayuntamiento el que ha abonado la cantidad estipulada e impulsado el proyecto de rehabilitación al que va vinculada la venta.
En este caso, se trata de un casa de apenas 35 metros cuadrados que, por su distribución, habría muy compleja la rehabilitación. Serán los nuevos propietarios los que se encargarán de la demolición y construcción de una nueva casa adosada a la contigua. El consistorio ha destacado que de esta forma se solventa un problema urbanístico a través de «un procedimiento pionero previsto en la ley pero poco o nada utilizado en la Comunitat Valenciana». El dinero de la venta servirá para cubrir los gastos ocasionados al consistorio mientras que, el que sobre, se prevé entregar al propietario.