El potencial turístico de Cullera también se valora entre las empresas que apuestan por los nuevos transportes que se expanden por las ciudades, sobre todo con el objetivo de combatir la contaminación y aportar un nuevo modelo de vida más saludable. La empresa maltesa Bee Rent ha empezado a trabajar en la capital turística de la Ribera y lo hace con una flota de doscientas bicicletas que se podrán alquilar para desplazarse por todo el casco urbano y que ayudarán a los usuarios a combatir los problemas con el aparcamiento que todos los veranos se viven en la ciudad con la llegada de miles de turistas y nuevos habitantes.

Inicialmente la empresa tiene previsto instalar doscientas bicis con el formato de «Bee rent». En total se instalarán cincuenta estaciones del parking de las bicicletas de alquiler, lo que significa se contará con una estación disponible alrededor de cada cien metros. La compañía ha realizado un estudio de mercado en el cual se espera poder ampliar las doscientas bicicletas de alquiler iniciales a más de cuatrocientas durante la época estival, sobre todo después de la apuesta realizada por el ayuntamiento que comanda Jordi Mayor que ha permitido expandir el carril-bici a lo largo de varios kilómetros, permitiendo una comunicación alternativa de gran fluidez y salubridad. Esta empresa internacional de alquiler de bicicletas ha elegido Cullera como ciudad pionera en España, a la cual se le sumarán otros enclaves como por ejemplo Premià de Mar en Catalunya. El transporte con bicicleta está viviendo en los últimos años una fuerte expansión en el territorio valenciano, caso de la ciudad del Cap i Casal, donde el actual equipo de gobierno ha construido en la actual legislatura decenas de kilómetros para comunicar la ciudad, experimentándose un auténtico «boom» con cientos de ciclistas, también turistas, por las calles. También se ha intentado en algunas ciudades de la Ribera e incluso se apostó por un plan de alquiler de bicicletas en las principales ciudades que finalmente no funcionó. En buena medida por la falta de «cultura ciclista» de la ciudadanía. En Cullera, el alquiler de las bicicletas se realizará con una aplicación de móvil, a través de la cual se podrá pagar y así acceder a cualquiera de las monturas en alquiler en los 50 puntos ubicados en todo el recorrido, desde la urbanización Buenavista hasta el Dosser. Además, se podrá dejar la bicicleta en cualquier punto, con la simple acción de realizar una fotografía que determine el lugar donde ha sido reintegrada para su posterior cesión a otro usuario.