El coronavirus avanza sin control y se cobra nuevas vidas. Mientras el ritmo de contagios se mantiene al alza, la estadística oficial de la conselleria de Sanitat añadió ayer seis fallecidos más a la lista de defunciones provocadas por la pandemia. En menos de un año, y pese a las medidas restrictivas y del conocimiento sobre las normas para evitar su expansión, ya son 129 las personas que nos han dejado para siempre tras contraer el Covid.
Los datos actualizados ayer, que no son los más recientes ni se acercan a la realidad de los municipios ya que pasan por un proceso previo de comprobación y revisión antes de subirse a la plataforma, arrojaban seis víctimas mortales más, la mitad de ellas en L’Alcúdia, que ha pasado a ser, con nueve, la cuarta localidad de la comarca con más defunciones. También sumaron víctimas mortales Algemesí (1), Alzira (1) y Sollana (1). En el caso de Algemesí ya son 19 las defunciones provocadas por la pandemia mientras que en la capital ribereña alcanza las 17.
Aunque la estadística oficial no muestra los datos correspondientes a la situación real, añadió casi un millar de nuevos contagios a la comarca tras los ofrecidos el viernes, concretamente 985 nuevos. Por localidades, se agregaron 172 positivos a Alzira, 97 a Carcaixent, 87 a Algemesí, 63 a Alberic, 58 a Alginet y 52 a Sueca. Pese al desfase temporal de la estadística, ésta ya reflejaba un escenario en el que 39 de los 47 municipios de la Ribera superaban el índice de riesgo máximo establecido por la OMS en 250 casos por cada 100.000 habitantes. De hecho, contabilizaba 2.409 positivos en un plazo de dos semanas en toda la comarca, lo que supondría que, de media, la incidencia acumulada se dispararía hasta los 600. Una cifra que, con todo, es mayor en estos momentos y que crece prácticamente a diario.
Son muchos los alcaldes de la comarca que ya han calificado como «crítica» la situación sanitaria a la que han llegado sus municipios. Los datos que Salut Pública transmite a los ayuntamientos periódicamente reflejan, como ya informó ayer Levante-EMV, un escenario en el que la transmisión del virus es comunitaria, no controlada y sostenida y que podría poner en un serio compromiso la estabilidad del sistema sanitario público. Cada día se baten los récords de positivos por coronavirus. Aunque no todos los contagios requieren de hospitalización, a mayor número de casos también aumenta el número de pacientes y se requieren más profesionales que centren únicamente sus esfuerzos en la pandemia.
Comportamiento responsable
El debate político, que también ha llegado a los municipios de la comarca, se ha centrado en los últimos días en la necesidad (o no) de un nuevo confinamiento. Más de un ayuntamiento vería con buenos ojos el encierro domiciliario, del que se excluirían las actividades económicas consideradas como esenciales. El gobierno autonómico, no obstante, (o al menos el ala socialista) aboga por dar un margen a las nuevas medidas implantadas tras el día de Reyes para comprobar su eficacia.
El ritmo seguirá en aumento ya que todavía no se conoce el impacto total de las cenas y comidas de familias y amigos de las últimas semanas. De hecho, tras el puente de octubre se incrementaron exponencialmente los casos de Covid y la tendencia no se invirtió hasta casi un mes después. Por lo tanto, durante las próximas semanas cabe esperar que las cifras se mantengan al alza.
Por ese motivo, los ayuntamientos de la comarca han activado en las últimas semanas las únicas medidas que pueden tomar en el ámbito municipal, como es la supresión de la actividad cultural y festiva y el cierre de instalaciones públicas. Ayer, la Junta de Gobierno de Carcaixent acordó prolongar las restricciones. «Es importante que la ciudadanía sea consciente de la preocupante situación que estamos viviendo y de la necesidad de mantener un comportamiento responsable», explicó el consistorio.