El colectivo La Ribera en Bici-Ecologistes en Acció ha mostrado su preocupación por el grave impacto ambiental que pueden generar las megaplantas fotovoltaicas que diferentes empresas impulsan en municipios del Marquesat y la Vall dels Alcalans -alude en concreto al proyecto de una empresa que ocuparía 400 hectáreas en el término de Llombai- y, si bien defiende las ventajas de la energía solar, alerta de que estas grandes instalaciones sobre tierra fértil no solo cubrirán la mayor parte de esa superficie con plásticos, metales u hormigón, sino que «probablemente también tratarán con herbicidas la tierra que quede libre para que no crezca la hierba, arrasando así el suelo fértil, el paisaje y los valores agroculturales».

Los ecologistas alertan que este proyecto «equivale a recalificar 400 hectáreas de zona rural (no urbanizable) en suelo industrial (urbanizable), además de seguir concentrando la economía y los beneficios en unas pocas manos».

Ecologistes en Acció no se posiciona en contra del proyecto, pero sí reclama que se reduzca el impacto que pueda tener «al mínimo posible» y con este fin reclaman al Ayuntamiento de Llombai que exija a la empresa promotora de la macrocentral fotovoltaica una serie de medidas correctoras entre las que señala que se deje libre la mayor parte del suelo, «hormigonando solo lo imprescindible para fijar los apoyos de las placas»; ubicar las placas elevadas dos metros sobre el suelo para que en esta superficie y, en especial, entre las líneas de placas, se planten hierbas aromáticas y otras especies autóctonas de porte reducido que no requieren de apenas mantenimiento ni riego, «de forma que mantengan más del 99 % del suelo vivo y cubierto de vegetación, una vegetación que podrá absorber toneladas de CO2 y ayudar a frenar la emergencia climática».

El grupo ecologista señala que con una buena selección de estas especies se puede abrir una fuentes de ingresos a través de la comercialización de estas plantas. Por último, reclama que se prohiba la utilización de productos químicos en la superficie de la planta.

«Las instituciones deben fomentar las placas en terrazas y tejados»

«Estamos absolutamente convencidos de que la energía solar es la mejor solución para los problemas energéticos y los impactos ambientales actuales. Somos acérrimos partidarios de las instalaciones solares en nuestras terrazas y tejados, donde el impacto ambiental es cero porque ya está construido y los beneficios económicos son para el pueblo». De este modo se pronuncia el colectivo La Ribera en Bici-Ecologistes en Acció, que emplaza a las instituciones públicas a fomentar la instalación de placas en viviendas ya que, según detalla, supone un ahorro considerable para los ciudadanos. Como ha informado Levante-EMV, diferentes empresas buscan localizaciones en los pueblos del Marquesat y la Vall dels Alcalans -en las inmediaciones de la subestación de Catadau- para construir grandes plantas fotovoltaicas.