La ordenanza municipal de Ayuntamiento de Almussafes que regula la tenencia, protección y venta de animales de compañía ha sido modificada para incluir aspectos que no se completaban en el documento inicial, aprobado a mediados de 2017. Ahora es obligatorio disponer de un recipiente con agua y vinagre para eliminar la orina depositada en los espacios públicos y encontrarse en posesión de la licencia correspondiente para contar con perros potencialmente peligrosos, tanto las personas propietarias como las que paseen a estos animales. Además, ya está prohibida la tenencia de los animales en obras, parcelas, locales, naves industriales y cualquier tipo de finca deshabitada. El concejal de Bienestar Animal, Jaime Wic, afirma que “en el ejecutivo municipal hemos detectado un avance enorme en concienciación, pero siempre hay aspectos en los que se puede mejorar, de ahí que hayamos decidido añadir algunos puntos con los que estamos plenamente convencidos de que la convivencia y el confort de todos y todas aumentará de manera considerable”.

Tras casi cinco años en vigor, el Ayuntamiento de Almussafes acaba de modificar la ordenanza municipal reguladora de la tenencia, protección y venta de animales de compañía con el objetivo de ampliar su alcance y garantizar tanto la dignidad de estos seres como la salubridad de los espacios públicos situados en la población.

“La ordenanza data del 23 de junio de 2017 y desde entonces hemos ido viendo como se adaptaba la ciudadanía a la norma. Sin duda, en el ejecutivo municipal hemos detectado un avance enorme en concienciación, pero siempre hay aspectos en los que se puede mejorar, de ahí que hayamos decidido añadir algunos puntos con los que estamos plenamente convencidos de que la convivencia y el confort de todos y todas aumentará de manera considerable”, señala el concejal de Bienestar Animal, Jaime Wic.

Entre los cambios más significativos se encuentran que las personas propietarias o que paseen animales de este tipo “deberán disponer de un recipiente con una solución de agua y vinagre para diluir la orina que los animales hayan depositado” en espacios públicos, además de bolsas de plástico para retirar los excrementos. Quedan eximidos del cumplimiento de esta obligación las personas invidentes que sean titulares de perros guía, se detalla en el documento.

Los cambios en la ordenanza suponen un avance en la eliminación del sufrimiento animal. ED

La actualización de la ordenanza, en cuyo periodo de exposición pública no se ha recibido ninguna alegación y, por lo tanto, ya es definitiva, también incorpora otros puntos. Por ejemplo, a partir de ahora “se prohíbe la tenencia de los animales en obras, parcelas, locales, naves industriales y cualquier tipo de finca deshabitada”.

 Animales potencialmente peligrosos

Por último, en el apartado de animales potencialmente peligrosos, la norma especifica que “una misma persona no podrá pasear a dos o más animales” de este tipo “a la vez”. Asimismo, ya es obligatorio también que “todas aquellas personas que manejen, incluso para el paseo o esparcimiento, de forma habitual, continua o circunstancial, perros definidos como potencialmente peligrosos deberán estar igualmente en posesión de la correspondiente licencia”. Esto último incluye, tal y como se precisa en el texto, a “aquellas personas que, sin ser propietarias ni poseedoras o usuarias en propio interés, se dediquen por cuenta de otros al cuidado, mantenimiento, educación o entrenamiento” de canes con estas características.

“Con estas pequeñas modificaciones lo que pretendemos es seguir avanzando en nuestro reto de eliminar por completo el sufrimiento animal, garantizar la seguridad física de vecinos y vecinas y acabar definitivamente con esas desagradables estampas de suciedad y malos olores que a veces nos encontramos en la calle y que denotan una falta absoluta de empatía y urbanidad”, insiste el edil.