El precio de la vivienda regresa, en la comarca de la Safor, a una situación muy parecida a la que se encontraba durante los primeros años de la crisis. Así lo reflejan los datos del Ministerio de Transportes, Moviliad y Agenda Urbana, que recoge la situación de las ciudades de más de 25.000 habitantes, como son Gandia y Oliva. En ambos casos, durante el tercer trimestre del año el precio de la vivienda se ha situado en máximos desde el año 2012.
En el caso de la capital de la Safor, el incremento respecto al mismo periodo del año anterior es del 5%, al pasar de 966 euros por metro cuadrado de media a los 1.017. Para encontrar una cifra parecida hay que echar la vista nueve años atrás, hasta el 2012, cuando se situaba en los 1.128 euros. En los dos casos, de cualquier modo, la situación no tiene nada que ver con el nivel al que se adquirían las viviendas en Gandia el año que estalló la crisis, el 2007, cuando el metro cuadrado se pagaba a más de 1.600 euros.
Eran aquellos tiempos en los que las promociones de pisos se vendían mucho antes incluso de que se pusiera el primer ladrillo, sobre plano, y en los que las entidades bancarias las financiaban sin mayor rubor.
No hace mucho que Gandia alcanzó su nivel mínimo histórico del valor de las viviendas, con 798 euros por metro cuadrado. Fue en el tercer trimestre del 2017, 219 euros más en cuatro años. Fue precisamente en ese ejercicio donde cambió la tendencia a la baja que venía registrando el precio de la vivienda desde el 2008.
Para bien o para mal, Gandia es una ciudad donde la vivienda tiene mucho protagonismo. No en vano, un estudio de la Generalitat la sitúa como la ciudad grande con el alquiler más tensionado de la Comunitat Valenciana. Al alto precio de los arrendamientos se suma, además, su alto precio.
En cambio es, a su vez, uno de los municipios con mayor vivienda pública después de la compra de la Generalitat a la Sareb de un edificio entero en el Grau con 14 viviendas. De ese modo, la ciudad dispone de una importante cartera de pisos para ofrecer a familias con pocos recursos o que hayan perdido sus viviendas.
Además, la capital de la Safor también es la ciudad de España en la que mayor rentabilidad le sacan a una vivienda aquellos propietarios que deciden ponerlas en alquiler.
Oliva, por su parte, ha situado el precio medio de sus viviendas en 1.048 euros por metro cuadrado, ligeramente por encima que el de Gandia. En el anterior periodo el valor era de 978 euros por cada metro cuadrado.
Un 30% más en cuatro años
La segunda ciudad en número de habitantes de la Safor tampoco alcanzaba un nivel similar desde el año 2012. Como en Gandia, solo unos años antes, en 2007, el municipio rozaba los 1.600 euros el metro cuadrado.
Como la capital de la comarca de la Safor, Oliva también alcanzó su menor cuantía en el año 2017. En este caso, la vivienda se colocó en esta ciudad en 790 euros el metro cuadrado. Eso significa que, en apenas cuatro años, el precio de la vivienda se ha disparado entorno a un 30% en las dos principales ciudades de la comarca de la Safor.
Así pues, ni siquiera el contexto de pandemia ha frenado la escalada que ya se venía registrando en los últimos años. En todo caso, parece difícil que se lleguen a alcanzar los niveles en los que estaba antes de la crisis.