1. Cepilla tus dientes todos los días

Lo ideal es hacerlo tres veces al día y durante tres minutos. El cepillado correcto se basa en movimientos suaves y cortos.

2. No olvides cepillarte lengua y encías

3. Cambia tu cepillo de dientes con regularidad

Los expertos recomiendan cambiarlo cada tres o cuatro meses.

4. Utiliza un dentífrico con flúor

Ayudan a fortalecer los dientes y evitan la aparición de caries.

5. Usa hilos dentales

Son un complemento perfecto para limpiar las superficies de los dientes donde el cepillo no llega. Se recomienda usarlo una vez al día.

6. Enjuagues bucales

El uso frecuente de colutorios protegen tu boca de bacterias.

7. Visita a tu dentista

Por lo menos una vez al año para prevenir posibles problemas.

8. Come chicles

Los chicles sin azúcar disminuyen el nivel de acidez que se produce en la boca tras las comidas.

9. Dieta sana y variada

Tomar alimentos como el melón, sandía, sardinas o tomates ayudan a conseguir una buena hidratación de tus dientes.

10. Evita golosinas o bebidas muy frías

El azúcar o el frío son prejudiciales para tu boca. Además desgastan el esmalte de los dientes.