El Instituto de Física Corpuscular (IFIC), centro mixto de la Universitat de València y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), ha probado el sistema diseñado para la monitorización de la terapia hadrónica, un nuevo tipo de terapia contra el cáncer que usa partículas cargadas pesadas, generalmente protones.

Según ha informado en un comunicado el grupo de investigación IRIS (Image Reconstruction, Instrumentation and Simulations for medical imaging applications) del Instituto de Física Corpuscular (IFIC, UV-CSIC), a diferencia de la radioterapia convencional de rayos X, la propiedad física de este tipo de partículas permite concentrar la dosis de radiación de forma localizada, lo cual reduce el riesgo de dañar los tejidos sanos.

El sistema, probado en las instalaciones clínicas del centro de protonterapia de Cracovia (Polonia), está diseñado para el tratamiento de tumores a los que no llegan, o lo hacen con dificultad, las técnicas convencionales, y han recordado que las partículas pesadas destruyen el tumor con mayor efectividad que los fotones.

Los investigadores han señalado que un ejemplo serían "aquellos cánceres que requieren de altas dosis de radiación para su control y se encuentran cerca de órganos de riesgo; o de tumores pediátricos, dada la sensibilidad de los órganos que están todavía en desarrollo".

Gabriela Llosá Llácer, coordinadora de IRIS, ha apuntado que "actualmente, las técnicas de monitorización que se vienen utilizando presentan problemas de baja eficiencia o de integración con el tratamiento".

Ha añadido que las cámaras Compton que utilizan les están mostrando "gran capacidad para obtener imágenes de las distribuciones de fotones en el rango de las energías de los MeV, con un diseño más compacto y mayor facilidad para integrarse en la sala de tratamiento que otras tecnologías"

La colaboración del grupo IRIS con el Centro Nacional de Aceleradores (CNA) de Sevilla, el KVI-Center for Advanced Radiation Technology (Groninga, Países Bajos), o los centros de protonterapia Quironsalud de Madrid y Cracovia (Polonia), entre otros, ha servido al grupo para identificar las mejoras oportunas en el prototipo y posicionarse como uno de los más adelantados entre los grupos que trabajan en el desarrollo de cámaras Compton para esta aplicación.

El nuevo sistema se encuentra en fase de valorización de la tecnología a través del proyecto VALMONT, financiado por la Agència Valenciana de la Innovació (AVI), como paso previo a su introducción en el mercado. Actualmente se está desarrollando y validando un prototipo viable clínicamente con el fin de elevar su Technology Readiness Level (TRL) hasta un nivel 7.

Además, el proyecto VALID, financiado por el Ministerio de Ciencia e Innovación, permitirá realizar pruebas en el centro de protonterapia Quironsalud de Madrid y evaluar su uso también en otros ámbitos.