El brutal vídeo en el que dos perros de presa atacan violentamente a una cría de jabalí en el patio de una vivienda de Simat de la Valldigna, del que informó en su día Levante-EMV y que pronto se hizo viral por la gravedad de sus imágenes, ya tiene castigo. El joven que aparecía en él azuzando a los dos canes para que siguieran mordiendo al jabato, que sufrió importantes desgarros por todo el cuerpo, ha sido condenado finalmente por un delito de maltrato animal a una pena de seis meses de prisión tras reconocer ayer los hechos en un juicio rápido celebrado en los juzgados de Sueca.
Al carecer de antecedentes penales y ser la pena inferior a dos años de cárcel, la misma le será suspendida por un plazo de tres años. Eso sí, la Fiscalía de Medio Ambiente de València no se opuso a la suspensión de la ejecución de la pena pero fijó una condición pionera en la Comunitat, que el condenado se someta a un programa formativo en materia de protección de animales.
El programa en cuestión, Probeco, consta de cuatro fases y tiene una duración de nueve meses, con una clase semanal de terapia grupal. Aunque dicho programa de reeducación en habilidades sociales está pensado para condenados por distintas tipologías delictivas, una fase específica del mismo es precisamente la prevención del maltrato animal y la sensibilización medioambiental. Desde que entró en funcionamiento a mediados de 2018 es la primera vez que un condenado por maltrato animal participará en València en estos cursos promovidos por Instituciones Penitenciarias, según ha podido saber este periódico.
Los hechos por los que ha sido condenado el joven, de 23 años y vecino de Simat de la Valldigna, se produjeron el pasado mes de octubre con un jabato que había capturado en el monte y que retenía en su domicilio de este mismo municipio. Según ha acabado confesando el autor del maltrato animal, azuzó a dos perros de su propiedad contra la cría de jabalí, a la que mordieron reiteradamente en diferentes partes del cuerpo. La tortura al animal, que chillaba y sufría por los continuos mordiscos, se prolongó durante varios minutos sin que el acusado hiciera nada por tratar de evitarlo, como así reflejan las imágenes.
En el vídeo se observa a otras personas, que jalean su acción y bromean con el sufrimiento del jabato. No obstante, contra éstos, incluido aquel que grabó las imágenes, no se han adoptado medidas legales ya que el Código Penal todavía es muy laxo en los delitos de maltrato animal cuando no hay una acción directa contra éste.
No está probado que muriera
Se sospecha que el animal murió como consecuencia de los graves desgarros que presentaba aunque esta parte no ha quedado acreditada al no encontrarse el cuerpo del jabato. Según declaró en fase de Instrucción el joven, lo dejó suelto en el monte.
El fiscal de Medio Ambiente solicitaba nueve meses de prisión por un delito de maltrato animal, así como la inhabilitación especial para el ejercicio de profesión, oficio o comercio que tenga relación con los animales y para la tenencia de los mismos por un plazo de tres años. Debido a la conformidad alcanzada por las partes ayer, el Juzgado de Instrucción número tres de Sueca rebajó la pena a seis meses de cárcel y dos años de prohibición de tener animales.
