El juicio por el cruel e inhumano asesinato machista de Jordi, de solo once años, a manos de su propio padre, en abril de 2022 en Sueca, para causar un dolor inhumano a su expareja y madre del pequeño da comienzo hoy con la selección de los nueve miembros del jurado popular –junto a dos suplentes– que tendrán que dilucidar sobre cada uno de los hechos y cuestiones que determinarán posteriormente el castigo penal para su presunto asesino, que se enfrenta a la prisión permanente revisable, la mayor pena que contempla la Justicia española.
El acusado de asesinar a su hijo, tranquilo ante el jurado.
Miguel Angel Montesinos
El juicio por el cruel e inhumano asesinato machista de Jordi, de solo once años, a manos de su propio padre, en abril de 2022 en Sueca, para causar un dolor inhumano a su expareja y madre del pequeño da comienzo hoy con la selección de los nueve miembros del jurado popular –junto a dos suplentes– que tendrán que dilucidar sobre cada uno de los hechos y cuestiones que determinarán posteriormente el castigo penal para su presunto asesino, que se enfrenta a la prisión permanente revisable, la mayor pena que contempla la Justicia española.
El presunto asesino se muestra tranquilo durante el primer día del juicio.
Miguel Angel Montesinos
El juicio por el cruel e inhumano asesinato machista de Jordi, de solo once años, a manos de su propio padre, en abril de 2022 en Sueca, para causar un dolor inhumano a su expareja y madre del pequeño da comienzo hoy con la selección de los nueve miembros del jurado popular –junto a dos suplentes– que tendrán que dilucidar sobre cada uno de los hechos y cuestiones que determinarán posteriormente el castigo penal para su presunto asesino, que se enfrenta a la prisión permanente revisable, la mayor pena que contempla la Justicia española.
El juicio por el cruel e inhumano asesinato machista de Jordi, de solo once años, a manos de su propio padre, en abril de 2022 en Sueca, para causar un dolor inhumano a su expareja y madre del pequeño da comienzo hoy con la selección de los nueve miembros del jurado popular –junto a dos suplentes– que tendrán que dilucidar sobre cada uno de los hechos y cuestiones que determinarán posteriormente el castigo penal para su presunto asesino, que se enfrenta a la prisión permanente revisable, la mayor pena que contempla la Justicia española.