Ganar al Málaga permite al equipo afrontar con más optimismo el partido de Liga de Campeones y, además, calmar el ambiente que, en las últimas semanas, empezaba a crisparse. «Ganar lo cura todo», apunta Jaume Ortí. Una valoración que comparte Fernando Giner y Blas Madrigal. «El Valencia necesitaba ganar, y se ganó», afirma el presidente de los futbolistas valencianos. «Con actitud, el camino es más sencillo», sostiene el máximo representante de las peñas.
«Vamos saliendo de la UCI y ya estamos en planta», ejemplifica Jaume Ortí. «Más allá de los tres puntos, durante el partido se vieron detalles positivos y el equipo demostró que quiere volver a ser competitivo», reflexiona. «Por fin se celebraron goles y la gente salió del campo con un buen sabor de boca», sostiene. «El equipo, parece, tiene ya otra cara. Para contar los pasos que se dan hacia adelante , siempre hay que dar un primero», valora. El partido, para Ortí, tuvo varios nombres propios. Para bien y para mal. Hacia André Gomes todo son elogios. «Con André en el campo, todo es más fácil porque es un jugador que, con su juego, activa a sus compañeros y los hace mejores. Potencia al grupo. Hoy por hoy es clave para hace jugar al equipo», mientras que lamenta el comportamiento de la afición hacia Dani Parejo. «Es injusto cómo le trata Mestalla», lanza. «El público no se está portando bien con un jugador que lo da todo y que nunca se esconde. No se le puede pitar a un jugador de tu equipo cuando se dispone a lanzar un penalti. Si entre dos jugadores quieren discutir por quién lo lanza es cosa de ellos pero cuando uno se pone ante la portería hay que animarlo y no desconcertarlo», reflexiona tras incidir en la aportación de Aderllan Santos que, afirma, demostró que «puede ser titular en el equipo».
Fernando Giner quiere pensar que éste será un punto de despegue pero, insiste, eso sólo se comprobará dentro de cuatro o cinco partidos. «Si desde el 3-0 al Málaga se encadenan victorias se podrá dar valor a lo conseguido, sino serán tres puntos y au», valora el exjugador. «Siempre debe haber un inicio en el que apuntalar la remontada. Lo importante es que se ganó a un buen equipo y por una renta amplia. Un 3-0 siempre es un buen resultado que ayuda a coger confianza y permite disfrutar a la afición», apunta tras destacar que, por fin, no se escucharon «pitos generalizados».
Giner, no obstante, aprovecha para poner en valor el trabajo de Dani Parejo. «En la primera parte, Dani sólo perdió un balón y la gente lo juzgó sin ningún tipo de piedad. Me da la sensación de que la gente la ha tomado con él. A mi me gustó su partido. Es un jugador que, cuando tiene el balón, arriesga y a veces lo paga caro. Es su forma de jugar. Creo que, además de porque así estaba asignado, lanzó el penalti porque lo necesitaba», reflexiona.
Blas Madrigal, por su parte, destaca la «actitud» con la que el equipo afrontó el partido. «La mejora, respecto a otros partidos, fue muy grande y eso es lo que a los valencianistas nos interesa. Por fin, se vio a un equipo unido que se puso a jugar a futbol y se olvidó de otras cosas. Se jugó con otro aliento», enjuicia. «Desde desde el túnel de vestuarios se vio que el comportamiento, la concentración y la alegría de los futbolistas era diferente», lanza. «La afición, al ver al equipo con mejor actitud, pronto se sumó al partido y se animó muchísimo. Hasta ahora, a la mesa le faltaba un pata y la pata ya se ha colocado en el tablero; ahora hay que soldarla para que no se doble», ejemplifica, tras reconocer que no le gustó cómo la grada trató a Dani Parejo.
