"Neville tratará de inculcar ese código inglés de equipo que no se rinde nunca"

Nunca se sabe. Es cierto que aún desconocemos lo que es el Valencia de Neville. Como entrenador no ha tenido tiempo todavía para implementar sus conceptos, pero también eso es una dificultad para nosotros como rivales. Tampoco sabemos qué Valencia nos vamos a encontrar. Trabajamos sobre unas bases que el Valencia sabemos que tiene de siempre con independencia del entrenador, y que son a nivel de la aportación individual de sus jugadores, más algunos conceptos que ya se han dejado ver en Eibar, en partidos de Copa, contra el Lyon en Champions... En todo caso, la dificultad de ir a Mestalla ante el Valencia siempre es enorme. Y nosotros, sin estar mal, tampoco estamos con una fortaleza para decir que llegamos en buen momento.

¿En la figura de Gary Neville qué sobresale? ¿El técnico novel o la personalidad de uno de los jefes del vestuario del United?

Como futbolista transmitía una gran experiencia, mucho carácter. Pero ahora ya no eres jugador, eres entrenador. Con independencia de sus conocimientos, que los tendrá, como entrenador es difícil calificarlo porque acaba de llegar y es una incógnita. Pero como jugador no regateaba ningún esfuerzo, tenía temperamento y una dosis de liderazgo en un club tan grande como el Manchester United. Intentará que esos valores que lo definieron como jugador transmitirlos a su grupo.

La influencia de Neville a corto plazo se debe notar, entonces, en intangibles como el carisma.

Por lo pronto tratará de inculcar ese código de fútbol inglés, noble, de máximo esfuerzo, que él representaba bien, la sensación de equipo que no se rinde nunca. En realidad es lo que queremos todos los entrenadores. Uno debe medir como rival lo que el Valencia quiere ser „un equipo ofensivo y que intenta jugar„, pero basarse en lo que ha sido hasta el momento para hacerse una idea de lo que te vas a encontrar.

¿Aplicar esos valores sobre una plantilla calificada como muy joven y tierna es posible?

La diferencia en la media de edad de los equipos apenas varía en unas décimas, en realidad. Todos tenemos jugadores jóvenes. Lo que mido es que el Valencia tiene juventud pero también experiencia, jugadores internacionales en varias posiciones y jóvenes que han sido campeones del mundo, por lo que no me parece que sea una plantilla inexperta. Aludir a la juventud del Valencia no me parece una cita cierta. Antes te diría que tiene jugadores con un futuro cercano muy bueno, porque tienen talento y están en edad de progresar y mejorar más.

¿Los técnicos rivales cuentan con la ansiedad que se atribuye a Mestalla como un factor a favor o es más una leyenda?

No es lo mismo ir a Mestalla hace un mes, con el ambiente enrarecido que habíamos estudiado en los partidos del scouting, como el día de Las Palmas o la primera parte contra el Levante UD. Ese run run en los momentos que el rival jugaba mejor se ha convertido en una corriente positiva. Mestalla lo sabe transmitir bien. Intentaremos entrar bien en el partido, pero por nosotros, no por lo que haga o deje de hacer Mestalla.

¿Desde su experiencia en Mestalla, como segundo de Quique, cómo define esa corriente cambiante de la grada?

Lo hemos «sufrido» todos, y lo digo desde el cariño. Donde llega a mi memoria lo recuerdo, y como técnico lo sufrimos. Fuimos destituidos estando en Champions, a cuatro puntos del líder, y tras perder un partido con dos expulsados en Sevilla. Era octubre y ya había un ruido social importante. Incluso con Rafa Benítez lo hemos visto, que al principio contó con una situación complicada.

El poso de un equipo con tradición competitiva

Es la exigencia de una afición y un club grandes. Ha visto a grandes jugadores, grandes entrenadores y ha conseguido grandes títulos y lógicamente la exigencia es alta. No debe molestar, al revés, se debe convivir con ello. Puestos a hablar de presión, es mejor que sobre a no que falte. Si se sabe encauzar, esa presión es positiva.

¿Qué Getafe veremos en Mestalla? A domicilio sólo han sumado un punto.

Yo quisiera que fuera diésemos continuidad al buen rendimiento que tenemos en casa. El nivel en el Coliseum es bueno, perdimos contra el Barça pero no fue una derrota deshonrosa. En casa somos fiables, agresivos y encajamos pocos goles. Fuera no bajamos los brazos, no nos rendimos, pero nos marcan pronto y remamos siempre contra corriente. Quiero entrar bien en el partido, intentar golpear primero... No es la mejor plaza, pero en alguna tiene que llegar la primera victoria.

Ha regresado al Getafe tras once años ¿Ha visto muy cambiado el club, desde el mérito de no haber descendido nunca?

No ha cambiado mucho. He mantenido relación con mucha gente de la casa, que todavía sigue. Sí que pensaba que a nivel interno había crecido algo más. Curiosamente el club es muy parecido al que entré. Cuando un club lleva tantos años seguidos en la élite siendo modesto es que muchas cosas se han hecho bien. Pero también quiero cambiar algunas cosas para intentar crecer. Es un club estable en Primera, porque subió y no ha vuelto a bajar, pero tampoco hay que olvidar que llevamos dos años salvándonos en las últimas jornadas. Yo no quiero que se coquetee con eso, quiero conseguir una permanencia más tranquila y, a partir de ahí, crecer en los años siguientes.

En una región dominada de forma avasalladora por Madrid y Atlético, y con un bastión reducido pero muy fiel y orgulloso como el del Rayo, ¿cuál es el espacio del Getafe?

Yo creo que tenemos nuestro espacio, y lo digo con sinceridad. Es una gran área, Madrid, comparado por ejemplo con Valencia es enorme, y hay espacio para todos. Es cierto que el Getafe no es un club con una masa social grande, pero sí con buenos seguidores. Igual que el Rayo tiene seguidores a muerte, nosotros también los tenemos. Al que es del Getafe le pasa como al que es del Rayo o del Levante UD, que es muy de su equipo. Eso es un orgullo.

Pero sí se arrastra la fama de que no va gente al estadio.

Tenemos cada vez más socios, a pesar de que se diga que no van aficionados al campo. Con el tiempo conseguiremos si se hacen bien las cosas que el Coliseum tenga el ambiente de lleno o casi lleno que había cuando llegué, con la sorpresa que supuso llegar. Luego se ha atravesado una etapa importante de crisis y la prioridad de la gente, y hay que entenderlo, no era tener el abono. Nuestro proyecto de futuro, desde dentro, es más interesante de lo que pueda parecer desde fuera.

Con un contrato de tres años, ¿qué papel va a tener Fran Escribá en ese futuro?

La idea es crecer como club, abaratar los abonos. Yo tengo un contrato que me encantaría cumplir. En mi fuero interno no quiero quedar todos los años decimocuarto, mi ambición me lleva a que este club crezca, que dé un salto de calidad y soñar, ya no con competiciones europeas, pero sí en estar en la primera mitad de la tabla. No sólo luchar por una permanencia cómoda. Pero primero vamos a salvar este año.

Desde esa ambición, ¿le gustaría volver a Mestalla?

La gente sabe el cariño que le tengo al club y he pasado 14 años de mi vida en el Valencia, pero es que ni me lo planteo. Primero porque estoy muy bien donde estoy, y quiero cumplir los tres años. La vida del entrenador es nómada, pero soy de vivir mucho el presente y este presente me ilusiona mucho.

Fuera de España ha estado en el Benfica, ¿le seduce volver al extranjero?

En mi mentalidad siempre ha estado. No sólo no descarto entrenar en el extranjero (he tenido ofertas los dos últimos años), sino que lo contemplo. Entre tener una carrera de 15 años en España y tener otra más corta pero repartida en más países lo preferiría. Me atrae, ya no sólo por el fútbol sino también por un tema cultural, en mi vida me gusta pensar en otras cosas que no sean el fútbol. No tiene por qué ser necesariamente las ligas más famosas, Premier, Calcio o Bundesliga. Hace tres veranos estuve dando charlas en Estados Unidos y conociendo su liga, mucho más atractiva de lo que la gente cree. Estoy abierto a ir a aquellos en los que piense que voy a ser feliz y me va a enriquecer culturalmente, como concepto de vida.

¿Cómo ve a Quique en el Watford?

Lo veo muy bien, es un equipo recién ascendido pero ha firmado jugadores de grandísimo nivel, y van a tener una permanencia muy cómoda.