La coordinadora de EUPV de la ciudad de València, Rosa Albert, se ha pronunciado este domingo sobre las declaraciones realizadas esta semana por el alcalde Joan Ribó tras su reunión con el arzobispo Cañizares, en las que decía que es 'complicado' que se consiga el cobro por aquellas actividades empresariales y lucrativas de la Iglesia. "Es lamentable que un gobierno municipal que se comprometió a lo largo de la pasada legislatura y en la propia campaña electoral a cobrar el IBI a la Iglesia se resigne ahora diciendo que es algo muy complicado y que no se va a poder avanzar en ello", ha dicho Rosa Albert.

"Una vez más, el equipo de gobierno se dedica a anunciar medidas progresistas mientras mantiene en la práctica las mismas políticas de la época del Partido Popular", ha explicado la coordinadora de la formación de izquierdas. "Hace unos meses ya exigimos concreción y avances en la cuestión del cobro de impuestos a la Iglesia mientras el concejal de Hacienda se limitaba a realizar anuncios preelectorales que nunca ha llegado a cumplir", ha dicho Rosa Albert.

Para la coordinadora de Esquerra Unida en la ciudad, "un mínimo exigible a un gobierno que se dice progresista es que se llegue hasta el final para acabar con cualquier tipo de privilegio, sin ponerse límites a sí mismo pese a lo que pueda decir la Ley de Mecenazgo; la Iglesia tiene la obligación de pagar por estos inmuebles por los que obtiene un lucro directo y los ayuntamientos tienen la obligación de llevar la iniciativa para girar todos los recibos y comunicar a la opinión pública el impago de los mismos si así es, con transparencia para que la ciudadanía conozca todo el dinero que se debería ingresar y no se hace, tal y como vienen reclamando entidades como Valencia Laica".

"Estamos prácticamente igual quee hace cinco años"

Rosa Albert ha recordado que el gobierno municipal debería haber avanzado ya en una cuestión tan básica como es la separación entre lo institucional y lo religioso, afrontando la cuestión con valentía y apostando al menos por una mínima pedagogía política. "Han pasado prácticamente cinco años y estamos prácticamente igual que cuando gobernaba la derecha en esta ciudad, la Iglesia ha seguido sin pagar el IBI, se siguen manteniendo los convenios y subvenciones que se tenían suscritos y los cargos públicos siguen participando en actos de carácter estrictamente religioso. Las promesas electorales deben cumplirse", ha afirmado Rosa Albert, quien ha recordado además que sólo en València la iglesia posee alrededor de 1.500 inmuebles, el 85% de los cuales no tiene un uso religioso.