València instalará cámaras en 10 monumentos para evitar robos

El Ayuntamiento de València ultima la instalación de cámaras de vigilancia en hasta 10 monumentos y museos de la ciudad. En concreto, los nuevos dispositivos de seguridad se ubicarán en la Casa-Museo Blasco Ibáñez, el Palacio de Cervelló, el Museo de Ciencias Naturales, el Museo de Historia, el Centro Arqueológico de l´Almoina, el Museo de la Ciudad, la Casa-Museo Benlliure, la Lonja, las Torres de Serranos y las de Quart. Además, se va a contratar también el personal encargado de asegurar la vigilancia durante 24 horas de estas instalaciones y de llevar a los bancos la recaudación diaria por las ventas de entradas. El contrato definitivo será adjudicado en los próximos días por cerca de 4,2 millones de euros y se prevé que los dispositivos estén colocados a finales de año. La Lonja goza de la alta distinción de Monumento Histórico Artístico de carácter nacional desde el 4 de junio de 1931 y fue declarada por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad el 5 de diciembre de 1996. Las torres de Quart y Serranos son Bien de Interés Cultural al igual que el Palacio de Cervelló. El Centro Arqueológico de l´Almoina es Bien de Relevancia Local. Son solo algunos ejemplos de la importancia que tienen estas joyas del patrimonio valenciano. Por ello, la Delegación de Patrimonio Cultural y Recursos Culturales, que dirige Glòria Tello, considera necesario colocar las cámaras que vigilarán y grabarán estos monumentos, para poder perseguir y detener a posibles vándalos o delincuentes que atenten contra estos inmuebles con agresiones o con robos o hurtos. No en vano, como se justifica en la memoria explicativa de la contratación estos «museos albergan las piezas más representativas del patrimonio histórico artístico valenciano, abarcando desde pinturas y esculturas, hasta vestigios arqueológicos o paleontológicos, siendo el denominador común de todas ellas, el tener un valor cultural y económico incalculable para la ciudad». En el contrato anterior solamente se incluía vigilancia de un monumento, la Lonja. El incremento notable de visitantes en las Torres de Serranos y Quart, y «la producción de incidentes debido a la imposibilidad de controlar el aforo y la correcta realización de las visitas» ha llevado también a contratar para las Torres «una ronda de vigilancia en horario diurno», se indica en el expediente del Ayuntamiento.