El viejo cauce del Turia iba a ser una autopista urbana pero acabó convirtiéndose el el mayor parque lineal de Europa, con sus nueve kilómetros de longitud y una anchura media de 120 metros, una arteria verde, deportiva, cultural y de ocio que recorre la ciudad por su centro, de Oeste a Este, y que se ha convertido en el orgullo de sus vecinos. Ese cambio de destino se produjo por una serie de decisiones políticas, pero principalmente fue impulsado por la reivindicación de la ciudadanía de la capital, que bajo el lema «el llit del Túria es nostre i el volem verd», logró torcer el brazo de las autoridades tardofranquistas y poner los cimientos del Jardín del Turia que hoy es uno de los símbolos más reconocidos de la ciudad de València tanto a escala nacional como internacional.

El 5 de junio de 1987, coincidiendo con el Día Mundial del Medio Ambiente, se abrían al público los primeros tres tramos del parque planificado por el arquitecto catalán Ricardo Bofill por encargo del Ayuntamiento de València. Se trataba de los sectores II (situado a la altura de Campanar y diseñado por el equipo valenciano Vetges-Tu i Mediterrània) y de las fases X y XI (entre los puentes del Mar y del Ángel Custodio, cuyo diseño se reservó para sí el propio Bofill), financiados ambos con los presupuestos municipales. Posteriormente vendrían muchos más tramos, sufragados por el consistorio, la Generalitat y la Diputaciò de València, como el estadio deportivo, el Parque Gulliver o el Parque Urbano Forestal, hasta cubrir de vegetación y posibilidades de paseo, práctica deportiva y todo tipo de actividades una inmensa superficie que los valencianos y visitantes llenan cada día del año.

Al cumplirse 35 años del estreno de los tres primeros sectores ajardinados, Levante-EMV ha querido promover un acto de evaluación de lo realizado en el Jardín del Turia y de lo que queda por hacer (como el tramo final, junto al puerto). Un acto que pretende convertirse en un homenaje al parque y a quienes lo hicieron posible. La cita es en el auditorio del Mar Rojo del Oceanogràfic de València el jueves, 2 de junio, a las 17.30 horas y la entrada será libre y gratuita para todos.

La Concejalía de Participación Ciudadana del Ayuntamiento de València que dirige Elisa Valía ha querido sumarse como promotora a este acto para subrayar los logros que se pueden alcanzar con la reivindicación y la movilización ciudadana. También promueven el acto el Instituto Mediterráneo para el Desarrollo Sostenible, que trabaja especialmente en los campos de la participación cívica y la sostenibilidad ambiental, económica y social, y el Organismo Autónomo Municipal de Parques, Jardines y Biodiversidad Urbana, encargado del mantenimiento del gran parque de València. El Colegio Oficial de Arquitectos de la Comunitat Valenciana y el Oceanogràfic, que cede sus instalaciones para acoger el evento, colaboran con esta iniciativa del diario, enmarcada en un programa de actos más amplio, con algunas citas promovidas directamente por el ayuntamiento, y en un vivo debate sobre cómo afrontar el diseño del tramo final del Jardín del Turia, su relación con la prolongación de la Alameda, su conclusión a la altura del puerto y los planes de rehabilitación de elementos singulares deteriorados por el tiempo y el uso, como la Casa del Agua, en Campanar, o los canales y parterres que diseñó Bofill ante el Palau de la Música. Una cita para quienes estiman la ciudad.