El concepto extendido, hasta la saciedad de que "la ciudad está sucia" ha llegado a la Federació d'Associacions Veïnals de València, que ha puesto el ojo en lo que considera "situación insostenible respecto al mantenimiento, limpieza y poda" en la ciudad. Y lo ha hecho a través de un comunicado de su presidenta, María José Broseta, que ha señalado ejemplos gráficos de que haya "carriles bici o aceras donde no se puede pasar sin agacharse para evitar las ramas de árboles y plantas", además de denuncias la diferencia de trato "del mantenimiento en zonas turísticas en comparación con los barrios periféricos, donde la dejadez y el abandono se hacen mucho más palpables". 

No se puede hablar tanto de flora autóctona protegida o de biodiversidad, que está muy bien, si después no se limpian y podan los alcorques”, ha explicado María José Broseta, que considera que "se transmite la imagen de una ciudad sucia". Reclama la presidenta vecinal más medios "para las labores de mantenimiento y poda".

Pero hay más: la reivindicación se extiende al servicio de recogida de basuras, "donde no hay un criterio homogéneo para la colocación y buen acceso a los contenedores, en particular los de recogida de cartín y papel, y que haya una frecuencia de vaciado adecuada para los usos y costumbres de cada barrio y demarcación". 

No entiende la federacióin que sea responsabilidad exclusiva del consistorio, porque lo extiende "a la parte de responsabilidad de la propia ciudadanía", por lo que reclama "la necesidad de desarrollar campañas pedagógicas informativas para conseguir que la totalidad de la ciudadanía considere sus parques y jardines y la totalidad del espacio público como la continuacion de su propia casa. Pero ha de venir acompañado de una correcta gestión del mantenimiento por parte de la administración".