Iberdrola ha anunciado hoy unas inversiones de 41.000 millones de euros durante el periodo 2024-2026 para impulsar la electrificación de la economía, ante la llegada de los nuevos usos de la demanda de energía. Así lo ha comunicado la segunda eléctrica del mundo por capitalización bursátil en la presentación de su Capital Markets Day, que se celebra en Londres durante el día de hoy.

El presidente del grupo, Ignacio Galán, afirma que este Plan estratégico está basado en el crecimiento orgánico focalizado en el desarrollo de las redes en mercados con alta calificación crediticia y en un selectivo crecimiento de las renovables, que permita la sustitución de los combustibles fósiles y el crecimiento del almacenamiento de la energía.

Ignacio Galán ha asegurado: “La electrificación es imparable. Las previsiones apuntan a que esta tendencia aumentará exponencialmente en los próximos años como única alternativa para dar respuesta a los retos actuales de la industria energética: autosuficiencia y seguridad energéticas, eficiencia, accesibilidad y competitividad, y, por supuesto, descarbonización, a la vez que se acelera el desarrollo económico y social en todo el mundo. Para ello harán falta más redes eléctricas para conectar la demanda, más energía limpia que sustituya los combustibles fósiles y más almacenamiento, que dé estabilidad al sistema y a los precios. Iberdrola ya está bien posicionada en estas áreas, y cuenta con experiencia y oportunidades para crecer orgánicamente en nuestros mercados clave”.

El plan de inversión de 41.000 millones de euros brutos incluye la compra del 18,4% de su filial estadounidense Avangrid y 5.000 millones de euros de inversiones con socios estratégicos. De esta forma, la compañía destina 36.000 millones de euros netos a la inversión. El 70% de su inversión estará focalizado en el crecimiento.

Por países, la compañía centrará el 85% de las inversiones en regiones con alta calificación crediticia -rating A-. Estados Unidos se sitúa como el principal mercado de expansión para los próximos tres años, donde destina el 35% de sus inversiones. Por detrás se encuentra Reino Unido, con un 24%, seguido de España y Latinoamérica, donde destina un 15% a cada uno y el resto de países de la UE y Australia, con un 11%.

Con esta estrategia la empresa se ha fijado como objetivo que el 70% de su beneficio operativo bruto (EBITDA) no esté vinculado al precio del mercado eléctrico mayorista en 2026.