El grupo de Homicidios de la Policía Nacional, responsable de la investigación del incendio del edificio de Campanar que ardió en la tarde del jueves causando al menos nueve muertos, un desaparecido y 15 intoxicados y heridos, ha comenzado a tomar las primeras declaraciones a testigos y a agentes de la Policía Nacional y de la Local que intervinieron en los primeros instantes como parte del equipo de emergencia desplazado al lugar.

Son los primeros pasos de una investigación que deberá aclarar no solo las causas del incendio en sí mismo, sino también las razones de la rapidísima propagación de las llamas a lo largo y ancho de la fachada, hasta el punto de que el fuego saltó enseguida de la primera torre, de 14 plantas de altura, a la segunda, y convirtió el edificio entera en una gigantesca tea envuelta en una espesa humareda negra.

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