El Índice Internacional de Alquileres de HousingAnywhere correspondiente al tercer trimestre de 2022 muestra que los precios de los alquileres en Europa han aumentado un impactante 16,5% en el último año y que han protagonizado un aumento trimestral del 3,5% durante lo que solía ser la típica temporada alta de alquiler. Mientras que en el trimestre anterior la reactivación de la movilidad internacional se consideró la principal causa del aumento de los precios del alquiler, en el tercer trimestre del año el aumento de los costes energéticos y una inflación anual disparada al 9,1% están presionando estos precios.

"Las facturas de energía sin precedentes, el aumento del coste de la vida y las continuas subidas de los precios del alquiler están poniendo a prueba los presupuestos domésticos", afirma Djordy Seelmann, director general de HousingAnywhere. "Los gobiernos están tomando medidas, como limitar los precios de la energía y subvencionar las facturas de energía. La cuestión es si estas iniciativas distraerán a los responsables políticos a la hora de resolver la falta estructural de oferta de vivienda que afecta a los precios del alquiler en muchos mercados europeos. Para hacer frente a los retos actuales de manera sostenible, y aunque las soluciones populares a corto plazo son tendencia, las principales partes interesadas en el ecosistema de la vivienda tienen que buscar un enfoque de colaboración y centrarse en conseguir alojamientos disponibles, accesibles y asequibles durante estos tiempos económicamente difíciles".

Cambios intertrimestrales más notables en los precios del alquiler

De media, los precios han aumentado un moderado 1-6% en términos trimestrales para todos los tipos de alojamiento (3,4% para las habitaciones privadas, 6,1% para los estudios y 1,1% para los apartamentos). Aunque los aumentos intertrimestrales puedan parecer bajos, un examen más detallado de la evolución intertrimestral por tipo de alojamiento y ciudad revela una gran variación.

Las siguientes ciudades muestran un incremento intertrimestral superior a la media, tanto en los precios de los apartamentos como de los estudios: Ámsterdam (18,3% y 17,5%), Lisboa (10% y 35,8%) y Atenas (14,3% y 15,8%). Sin embargo, en algunas ciudades los precios de los apartamentos y estudios también han disminuido en términos interanuales. Algunos ejemplos notables son Helsinki (-6,5% y -19,8%), Bruselas (-4,4% y -3,2%) y París (-5,6% y -6,6%). 

El caso de Valencia es especialmente relevante, según HousingAnywhere, ya que tras registrar en el segundo trimestre del año un aumento trimestral en el precio de los pisos y apartamentos en alquiler del 14,3%, la ciudad ahora registra una bajada del 16,7%. Así, después del verano, época en la que las ciudades costeras suelen ver su oferta de alojamiento residencial en alquiler todavía más reducida a causa de un traspaso de contratos a la tipología turística, los precios se estabilizan, pero todavía son un 25% más altos que hace un año.

Además de estas evoluciones más extremas, también ha habido ciudades en las que los precios de los apartamentos y estudios en alquiler han variado de manera menos acusada en términos intertrimestrales, por ejemplo, en Múnich (3% y 10,6%), Berlín (1% y 11,3%), Madrid (0,8% y 2,1%) y Milán (0% y 5,6%). En estas cuatro ciudades los precios de los apartamentos se han moderado en cierta medida. Además, los aumentos interanuales de los precios de los estudios se acercan más a la media, a pesar de que se han acelerado en Berlín y Múnich.