Mientras leo una entrevista en la que José Antonio Marina defiende posibles propuestas para su Libro Blanco „un documento que elabora por encargo del PP„ pienso en el estado actual de la educación pública en la Comunitat Valenciana, gobernada por ese partido durante los últimos 20 años. Pienso en la perenne falta de inversión educativa, el aumento progresivo de las ratios o la generosa política de conciertos económicos y cesiones de terreno público a centros privados. Recuerdo al exconseller de Educación Font de Mora, sirviéndose de conceptos relacionados con la «innovación pedagógica» „en concreto, la implementación del inglés como idioma vehicular en algunas asignaturas„ para dificultar que se impartiera Educación para la Ciudadanía.

Es posible que las soluciones del Libro Blanco sean políticamente neutras en el mundo de las ideas pedagógicas. Me pregunto si lo seguirán siendo cuando un legislador reaccionario las aplique a la realidad educativa española o sólo estamos ante otra campaña de blanqueo ideológico de la derecha. Claudia Compte Vives. Valencia.