¿Alguien le ha explicado a la señora Bonig que muchas, muchas familias valencianas, dependen de la apertura de la nueva RTVV? ¿Alguien le ha explicado que no solamente han sido víctimas del cierre de C9 los trabajadores? ¿Y el gran número de empresas audiovisuales que existían en la Comunitat Valenciana y que hoy han desaparecido? ¿Sabe cuántos puestos de trabajo generaban las productoras valencianas, las empresas de servicios de doblaje, iluminación, sonido, transportes, catering, publicidad, agencias de actores, etcéera?

Estoy convencida de que si tuviera algo de sensibilidad y conocimiento del sector audiovisual, no se atrevería a decir las palabras que acaba de decir. Cuando ella o alguno de sus asesores lo desee, le recomiendo que consulte con los profesionales del sector, esto evitaría hacer el ridículo más espantoso y doloroso a la hora de emitir declaraciones. El PP cerró la televisión después de hacer de esta institución pública de todos los valencianos, el instrumento de manejo de información y órgano de colocación de individuos de muy bajo conocimiento en el sector. Durante los veinte años que los populares manejaron el ente, lo saquearon, llevaron hasta el límite el número de empleados, provocando un crac en el audiovisual valenciano irreparable en mucho tiempo. Me parece de muy bajo nivel humano no apoyar e impulsar la oportunidad que ahora surge de devolver a los valencianos lo que un día les robaron de la forma más vil. Por favor, un poco de humildad y que abandonen su soberbia ya caduca. Dolores Martorell Peña. Valencia