Puigdemont es, como diría Truffaut si viviese, un «enfant terrible».Dice Puigdemont que combatirá la aplicación del artículo 155 con la ayuda de los alcaldes independentistas y que va a crear el Banco Central de Cataluña para financiarse y quedarse en la UE. Qué iluso. Y que también llamará a sus seguidores provocando enfrentamientos varios,pues se cree el presidente de España y por encima de la Constitución, haciendo gala y diciendo que será detenido por secesión.Se enfrenta ya nada menos al Jefe del Estado, al Gobierno de la Nación,a la UE, a todos los españoles que quieren la unidad de España, incluyendo una buena parte de catalanes, se enfrenta a los partidos constitucionalistas del Congreso de los Diputados y del propio Parlamento de Cataluña que le reprueban su actitud, se enfrenta a los empresarios constitucionalistas, a los inversores que huyen de Cataluña,a la Banca,etc. Solo un dictador como Maduro,que manda asesinar en las calles a sus opositores,se atreve a criticar a España en sus asuntos internos y se une a los secesionistas catalanes,aunque todos sabemos de que pie cojea.