Pasamos horas en el mundo de internet; donde algunos, engrandecidos por tener un lugar donde más de diez personas «escuchan» su opinión, sueltan una retahíla de palabrería y argumentos, defendiendo un tema como si fuese de vida o muerte, alegando que tienen la razón absoluta. ¿La prueba? El perfil de 10K de Followers del que han copiado sus ideas.

Aquí hay una gran variedad de temas de destrucción (que no de discusión); y van desde la homofobia, la transfobia, la xenofobia, la heterofobia (y todas las huma-fobias que existen) hasta llegar al animalismo, veganismo, vegetarianismo (y por qué no, al canibalismo; ya que, incluso los más liberales pecan de hacerse grandes devorando a sus iguales). Pero, siempre habrá alguién con una opinión completamente contraria, dispuesto a apuntar con todas sus armas hacia ti. La única similitud que encuentro aquí es que todos, se consideran liberales o liberadores de algo ¿Pero entonces, porque hacen lo mismo que denuncian? El hecho de que con un grito de libertad, se censure a otro diferente es hipócrita. E hipocresía, es es lo que es Internet (y el mundo).

Quizá si dejan de gritar tanto lo que oyen en boca de otros y escuchan, se soluciona algo. Azucena Izquierdo Sánchez. València