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Los impagos de la Conselleria de Educación empiezan a proliferar en el sistema de enseñanza público valenciano por la crisis y el endeudamiento de la Generalitat. Los 160 colegios públicos de Castelló han iniciado el año en una situación de asfixia económica. Educación les adeuda a estas alturas el pago del último trimestre de 2009 relativo a las ayudas del comedor escolar.

"Hay centros que están bajo mínimos y algunas empresas de alimentación no pueden pagar a los monitores por falta de liquidez", según señalaron desde la Asociación de Directores de Infantil y Primaria de Castelló. "Es la primera vez que sucede. En 30 años nunca se había sobrepasado la barrera de diciembre", añadieron.

Los colegios de la provincia, al igual que los del resto de la Comunitat Valenciana, están en una situación casi insostenible y urgen por ello el pago inmediato por parte de la Administración autonómica."Normalmente pagaban a trimestre vencido, entre el 25 y el 30 de diciembre. Ya han pasado 13 días de enero y aún no hemos recibido ni un duro", apuntaban desde el CEIP Bernat Artola de la capital de la Plana.

La Conselleria de Educación debe a los colegios de la Comunitat unos 22 millones de euros correspondientes al último trimestre de 2009 en concepto de gastos de funcionamiento de los comedores escolares, unos 14 millones, y de becas de comedor, otros 8 millones. Estas ayudas provienen de la aportación por el Ejecutivo valenciano de 1,44 euros por comensal y día para el funcionamiento del comedor y de los 3,91 euros diarios por cada uno de los 58.143 alumnos valencianos que este curso han obtenido la beca de comedor de la Generalitat.

Fuentes de Educación aseguraron que la orden de pago, como todos los años, se firmó en diciembre "pero por retrasos en la tramitación burocrática, la Conselleria de Hacienda no ha hecho aún efectivo el pago". "El ejercicio de 2009 se cerró sin cubrir estas cantidades. Éstas se ingresarán en las cuentas bancarias de los colegios de forma inminente, lo más probable a lo largo de la próxima semana", añadieron las mismas fuentes.

Los colegios están utilizando las cuotas que abonan los padres y su remanente para hacer frente a los costes del comedor. Y sus fondos propios empiezan a escasear. Son cuatro meses sin recibir las consignaciones pertinentes para este servicio, y las ayudas de la conselleria son básicas para el mantenimiento del mismo. El CEIP Bernat Artola lleva al respecto un mes sin pagar a la empresa suministradora de alimentos.

Fuentes de la Asociación de Directores de Infantil y Primaria calificaron el estado de los centros de "delicado", sobre todo, los que disponen sólo de una línea educativa, caso de los CEIP Guitarrista Tárrega o Columbretes de Castelló, por ejemplo. La práctica totalidad de sus alumnos inscritos en el comedor cuenta con una beca. Están con el agua el cuello y si no les llega pronto la ayuda que les corresponde del Consell su servicio de comedor podría verse obligado a cerrar. Hay ya firmas de alimentación que están aplazando el pago de las nóminas a los monitores, según apuntaron desde el colectivo de directores. "Llevo 26 años de profesor y en este tiempo el dinero había llegado siempre en diciembre", agregaron.

Detrás de estos impagos está la falta de financiación por parte del Gobierno valenciano. No es la primera que Educación se retrasa en sus pagos. En 2009 ya tardó tres meses en ejecutar el segundo trimestre del gasto corriente de los institutos públicos de la Comunitat.