La Generalitat se ha decidido por fin a tramitar el proyecto presentado por Montero Energy, la empresa que planea explorar los hidrocarburos del norte de Castelló. Esta mañana se procederá a la apertura del sobre que contiene la propuesta en presencia de los responsables de la empresa, según informaron ayer fuentes de la Agencia Valenciana de la Energía (AVEN). A partir de hoy se inicia la fase de estudio para determinar si se autorizan las prospecciones.

El proceso arrancó en septiembre, cuando la multinacional canadiense R2 Energy registró -a través de su filial española Montero Energy- tres solicitudes para explorar si hay hidrocarburos (petróleo y, sobre todo, gas) bajo el suelo de las comarcas de l'Alt Maestrat y Els Ports. Los proyectos, denominados "Aristóteles", "Pitágoras" y "Arquímedes", afectan a una superficie de 195.569,5 hectáreas y abarcan a cerca de 40 municipios castellonenses.

Dos meses después, a mediados de diciembre, expiró el plazo para que otras empresas presentaran ofertas de competencia. La AVEN dio unos días más de margen para confirmar que la de Montero Energy era la única propuesta, como así ha sido. Superado este trámite, la Generalitat debía citar a la empresa para proceder a la apertura del sobre con la documentación. Finalmente, será esta mañana cuando se cumplimente el formalismo en la sede de la Generalitat en Castelló.

El anuncio del desbloqueo del proyecto coincidió con el debate en las Corts Valencianes sobre la fractura hidráulica ("fracking"). El pleno la cámara rechazó, con los votos en contra del PP y a favor de los tres grupos de la oposición, una proposición de ley presentada por Compromís en la que solicita prohibir en toda la Comunitat el uso del "fracking" como técnica para la investigación y extracción de hidrocarburos. Los populares admitieron que la técnica plantea "riesgos potenciales", pero la consideran necesaria para "evolucionar".

El diputado de Compromís Juan Ponce señaló que su iniciativa busca "declarar el territorio valenciano libre de 'fracking'" una técnica que, a su juicio, "hipoteca el futuro". Ponce denunció que el método de la fractura hidráulica emplea "una gran cantidad de productos químicos muy tóxicos" y subrayó que en Estados Unidos son "ampliamente conocidos" sus "nocivos efectos ambientales" y la contaminación de acuíferos.

El diputado del PP Mariano Castejón destacó el apoyo de su grupo al dictamen del Consell, que recogió que los permisos solicitados son para investigar y no para extraer. Afirmó que el "fracking" tiene "riesgos potenciales" y es una técnica "peligrosa", pero añadió que "para que la sociedad evolucione hay parámetros para que las actividades se puedan llevar a cabo". Incidió en que "no se autorizará ninguna explotación" que afecte al medio ambiente "y mucho menos, a la salud de las personas".

Por su parte, la parlamentaria socialista Ana María Besalduch advirtió de que esta técnica pone "en peligro" la calidad del agua de la Comunitat. Asimismo, la diputada de EUPV Marina Albiol denunció "el elevadísimo coste social y el gran impacto ambiental" que generará la fractura hidráulica.