El sector crítico de la Junta de Festes de Castelló considera que las quejas de dos funcionarios justifican de sobra el relevo del actual presidente de la entidad festera. Estiman que esta circunstancia debería imposibilitar la continuidad de Bellido en una entidad pública.

La permanencia del presidente de la Junta depende de la asamblea de fiestas, que fue la que lo eligió el pasado mes de octubre para un periodo de cuatro años, pero puede ser revocado en el caso de que cometa alguna de las faltas graves que recogen los estatutos del propio Patronato de Fiestas, entre las que se encuentran la comisión de comportamientos que causen «desprestigio o perjuicio importante al normal desarrollo de las fiestas de la ciudad».

También estipula la reiteración de faltas leves, entre las que están «la incorrección con los ciudadanos en general, y con los miembros del patronato en el ejercicio de sus funciones».

La actuación sancionadora contra un miembro del patronato es competencia de la Junta de Gobierno Local. De momento, el equipo de gobierno del PSPV y Compromís se mantiene a la expectativa. También los grupos de la oposición. El Partido Popular, Ciudadanos y Castelló en Moviment han eludido pronunciarse sobre la situación de la Junta de Festes y las críticas de los dos empleados públicos.

La dirección de Seguridad y Emergencias de Castelló mantiene su malestar con el presidente de la Junta de Festes por los supuestos improperios al jefe de Protección Civil. Subraya que el responsable de emergencias tiene un carácter sosegado y tranquilo y que presentó una reclamación formal al ayuntamiento contra Bellido porque le vertió unas graves declaraciones y de «manera reiterativa».