Alrededor de 500 personas corrieron, sudaron, saltaron, reptaron, treparon y se enfangaron en Onda en la que fue la primera Umbroken Race, una carrera de obstáculos de 11 kilómetros que discurrió por los parajes naturales y por el casco urbano.

Los atletas salieron a las 10.00 horas del terreno ubicado detrás de Pío XII, y desde allí, se lanzaron a la conquista de un itinerario con unos 20 obstáculos y 400 metros de desnivel, ya que subió, entre otros lugares, al calvario, a la ermita de Santa Bárbara y al castillo. Esta es la primera vez que se organiza y posiblemente no será el último, y es que la mayor parte de corredores, salvo alguna lesión, salieron muy satisfechos de la prueba, que tuvo uno de sus mayores atractivos en el río Sonella.